La nueva PAC no convence a todos
Editorial de Gissèle Falcón, directora de Siete Agromarketing, eComercio Agrario y revistas ECA, publicado en la revista Anuario ECA OLIVE 2022, sobre la nueva PAC y sus efectos en el sector del olivar.
La nueva PAC está a la vuelta de la esquina. Con tres años de retraso a causa de la pandemia, el próximo 1 de enero entra en
vigor una nueva normativa europea que llega con cambios para el sector agrario en general, y para el del olivar, en particular.
Algunos de ellos con especial repercusión, como la reducción de regiones agrícolas, la distribución de los ecoesquemas o la inclusión de un plan sectorial para el olivar tradicional.
Unas modificaciones que, aunque se consideran una oportunidad para el ámbito agrario español, no convencen
del todo al sector olivarero. Principalmente porque se considera que puede conllevar un debate acalorado entre avanzar
hacia sistemas modernos e intensivos, y mantener los olivares tradicionales, seña de identidad cultural y fuente de riqueza económica y social en muchas zonas de producción españolas.
Este debate llega en un momento dulce para el sector. La campaña ha avanzado de manera muy positiva con producciones por encima de las previsiones iniciales -casi un millón y medio de toneladas- y unos precios al alza que superan las bajas cotizaciones de los ejercicios precedentes.
La buena salud del sector también queda reflejada en los avances técnicos que vienen desarrollándose en los últimos años. Algunos de ellos, incluidos en nuestro Dossier Técnico, caminan hacia un uso más eficiente y sostenible de los fertilizantes, para lograr una mayor resistencia a enfermedades como la Xylella fastidiosa o la Verticilosis o para hacer al olivo más resistente al cambio climático.
El sector camina imparable hacia un futuro brillante donde la calidad debe ser su principal seña de identidad.
Que así sea.