Informe revela las claves para reducir el desperdicio alimentario en el sur de Europa
El pasado 30 de marzo fue el Día Internacional de Cero Desechos.
Un nuevo informe de EIT Food y 21gramos destaca seis claves más una premisa para reducir el desperdicio alimentario en el sur de Europa, donde se genera un desperdicio per cápita superior al promedio europeo.
En el informe presentado por EIT Food y la consultora 21gramos, se analiza el desperdicio y la pérdida de alimentos en el sur de Europa, donde la media de desperdicio per cápita es de 273 kg anuales, mucho más alto que el promedio europeo de 132 kg. La investigación, que abarca países como España, Portugal, Italia, Grecia y Chipre, identifica seis palancas clave para transformar el sistema alimentario y reducir el desperdicio:
Prevenir el desperdicio: Priorizar campañas de concienciación, especialmente en países con menor regulación y debate público sobre el tema, como Malta, Chipre y Grecia.
Diferenciar entre pérdida y desperdicio: Adoptar soluciones específicas para cada tipo, como los envases comestibles de Bio2Coat para prolongar la vida útil de los alimentos.
Unificar criterios de medición: Implementar sistemas de gestión de alimentos basados en tecnologías como blockchain e inteligencia artificial, con ejemplos como la startup Oscillum, centrada en el desarrollo de etiquetado inteligente y promovida por EIT FAN Accelerator para evitar el desperdicio alimentario.
Enfoque holístico y multidimensional: Integrar soluciones de todos los actores de la cadena alimentaria, más allá de depender únicamente de la donación de excedentes.
Políticas coherentes: Diseñar políticas alineadas entre regiones y países, como el Consumer Observatory de EIT Food, para mejorar la gestión de los recursos.
Escalar startups innovadoras: Impulsar la revalorización de subproductos y la innovación en tecnologías para reducir el desperdicio alimentario.
Finalmente, la investigación destaca la importancia de compromiso colectivo entre empresas, gobiernos e instituciones para implementar soluciones efectivas. «Ejemplos como el espigamiento en España, las iniciativas de acuaponía en Portugal o los sistemas de donación y redistribución de alimentos en Italia y Turquía demuestran el impacto positivo de diferentes soluciones en las distintas etapas de la cadena de valor y nos inspiran a accionar el cambio», sostiene Begoña Pérez-Villarreal, directora de EIT Food en el Sur de Europa.
Con este informe, EIT Food y 21gramos invitan a todos los actores a colaborar en la construcción de un sistema alimentario más sostenible, basado en la economía circular y donde ningún alimento termine en la basura.