Los cítricos en el punto de mira ante el acuerdo con Mercosur
La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) ha trasladado en el Observatorio de cítricos de la Unión Europea, celebrado ayer en Bruselas, su elevada preocupación por el posible cierre del acuerdo UE – Mercosur y el impacto sobre las personas productoras en la UE.
Las importaciones de cítricos transformados de Brasil y Argentina se verían muy beneficiadas por un posible acuerdo, por la liberalización arancelaria que facilitaría su acceso al mercado comunitario, en detrimento de los envíos a la industria de nuestra producción. Si bien los efectos directos podrían notarse menos en el mercado de fresco, los desajustes del ya problemático destino industrial afectarían, en conjunto, a la rentabilidad de nuestras explotaciones citrícolas. Eso sería, definitivamente, la estocada de muerte para un sector que sufre desde hace años la competencia desleal de importaciones de Egipto, Turquía o Sudáfrica.
En el Observatorio europeo COAG también ha criticado el reparto del valor en la cadena citrícola. La organización entiende que no se trata de que el consumidor pague más en el lineal, ya que hay margen suficiente en la cadena para repartir a todos aquellos operadores que suman valor y que las personas del sector productor puedan seguir viviendo de su trabajo.
Sin embargo, las empresas de la distribución europeas obtienen grandes beneficios a costa de todo aquel que aporta valor en la cadena, especialmente del citricultor. “Por ejemplo, mientras en los lineales de la gran distribución en Bruselas podemos encontrar limón español a 3,18 €/kg, esos mismos cítricos nos los están pagando a 40-50 cts/kg en el campo”, ha señalado Pedro Gomáriz, responsable del sector citrícola de COAG.
En la sesión también se ha puesto de relieve el mayor control que están acaparando los fondos de inversión y las grandes empresas transnacionales en el sector citrícola europeo y español. Cuatro de los diez principales operadores de cítricos en España están controlados por fondos de inversión. “Se está produciendo una concentración empresarial que prioriza la rentabilidad frente a la comercialización del producto originario de nuestro país”, ha señalado Gomáriz. “Nos preocupa que nuestro futuro pueda depender más y más de los beneficios de cuatro grandes empresas, que vienen a marcar el devenir de las explotaciones de los citricultores y las citricultoras. Las autoridades deben adoptar medidas regulatorias que impidan que estos conglomerados empresariales y fondos de inversión destrocen nuestra modelo de citricultura ligado al territorio”.