La FEV pide avances en la simplificación administrativa de las bodegas
El director general de la Federación Española del Vino (FEV), José Luís Benítez, ha pedido este miércoles al Gobierno, en presencia de representantes de la Agencia Tributaria y del Ministerio de Agricultura, que escuche al sector bodeguero y trabaje de manera coordinada para eliminar al máximo las duplicaciones y cargas administrativas innecesarias que pueden suponer un lastre a la competitividad de las bodegas.
Benítez ha lanzado esta petición durante la jornada organizada por la FEV y la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) en Madrid para presentar el nuevo portal electrónico SILICIE, a través del cual las bodegas deberán presentar a partir de 2020 los libros contables de impuestos especiales.
En este sentido, ha agradecido la buena disposición de la Agencia Tributaria y su colaboración con el sector en la elaboración de la Orden Ministerial que regula este nuevo sistema, así como su oluntad de legislar pensando en los sujetos de esa Ley para adaptarla a la realidad de las bodegas. Igualmente, ha destacado el importante papel en estos meses de un grupo de expertos de la FEV, que
han trabajado en representación de todas las bodegas para conseguir el mejor resultado posible. Para el director de la FEV, el resultado final de la nueva Orden es positivo porque supone avanzar en
la digitalización de la información, simplifica algunos apartados y elimina algunas declaraciones obligatorias hasta la fecha. Así, considera que ésta puede ser la primera piedra para alcanzar una
simplificación administrativa real en el sector del vino, pero es necesario seguir avanzando porque, a día de hoy, las bodegas siguen teniendo que hacer frente a muchas declaraciones distintas
(Agricultura, INFOVI, AEAT, Consejos Reguladores,…), que en muchos casos solicitan información parecida pero en unos tiempos y formatos diferentes, lo que se traduce en una innecesaria carga
administrativa.
Por ello, la FEV ha propuesto la creación de un grupo de trabajo con todas las partes implicadas para trabajar de manera coordinada en la optimización de las declaraciones vitivinícolas en el corto plazo y, a medio plazo, alcanzar una verdadera simplificación administrativa en el sector. “La transparencia y la rendición de cuentas son fundamentales en cualquier sector, pero es fundamental que se lleven a cabo de una manera racional sin que suponga cargas ni trabas adicionales en el trabajo diario de las empresas, cuyos esfuerzos deben estar enfocados en elaborar
el mejor vino posible y comercializarlo con el mayor valor”, ha concluido.