El campo andaluz insiste en aplazar la aplicación de los ecorregímenes
El sector agrario andaluz, representado por ASAJA-Andalucía, COAG-Andalucía y Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía, insiste en la urgencia de aplazar la aplicación de los ecorregímenes del nuevo marco normativo de la Política Agraria Común (PAC) ante la incertidumbre que genera a los agricultores y los ganaderos la falta de una normativa clara, en continuo cambio y diseñada sin estudios de impacto previos.
Las organizaciones firmantes se muestran firmes tras la última provocación del ministro de Agricultura, Luis Planas, a los agricultores y ganaderos andaluces, que ha tenido lugar hoy mismo en el Congreso de los Diputados.
Allí, en respuesta a una pregunta en la sesión de control del Gobierno, el titular de Agricultura ha hecho un llamamiento “a la responsabilidad” para que el sector agrario aproveche todas las oportunidades que ofrece la nueva PAC, criticando además las “voces aisladas e irresponsables” que solicitan la no aplicación de los ecorregímenes, en clara alusión al rechazo que el Plan Estratégico de Planas ha generado en Andalucía, que justamente es la principal región agraria de España.
Esta afirmación del ministro ha provocado la indignación de las organizaciones agrarias ASAJA-Andalucía, COAG-Andalucía y Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía, quienes consideran que se trata de un claro desprecio a los agricultores y ganaderos andaluces.
Los representantes de la principal región agraria sostienen que “ni son voces aisladas, ni irresponsables”. El sector agrario andaluz tiene motivos de peso para rechazar el Plan Estratégico de la PAC, ya que hurta a Andalucía 500 millones de euros y busca desmantelar su modelo social y profesional de agricultura que mantiene vivo su medio rural, con el objetivo de abrir las puertas del campo a los fondos de inversión.
ASAJA, COAG y Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía entienden que lo irresponsable es exigir la aplicación de una norma que está en fase de borrador, con continuos parches y que sólo genera incertidumbre en el sector, por lo que lo lógico y sensato, si no hubiera otros intereses de por medio, sería retrasar un año la aplicación de los ecorregímenes.