Primer sello de sostenibilidad medioambiental para el Aceite de Orujo de Oliva
La nueva certificación, promovida por ORIVA y desarrollada por Bureau Veritas busca potenciar el alcance medioambiental del Aceite de Orujo de Oliva.
La Interprofesional del Aceite de Orujo de Oliva, ORIVA, ha dado a conocer la primera certificación en sostenibilidad medioambiental específica para la cadena de valor del Aceite de Orujo de Oliva.
El sello de sostenibilidad medioambiental del Aceite de Orujo de Oliva tiene como objetivo reforzar un modelo productivo basado en la sostenibilidad y la circularidad. Desarrollado por Bureau Veritas, permitirá a las empresas adheridas contar con un certificado que muestre el compromiso medioambiental del Aceite de Orujo de Oliva.
Durante su presentación, celebrada en Expoliva, José Luis Maestro Sánchez-Cano, presidente de ORIVA, ha destacado “la oportunidad de mejora y competitividad que supone esta iniciativa. Ponemos a disposición de toda la cadena de valor una herramienta para seguir potenciando nuestro imprescindible papel en la sostenibilidad del olivar y hacer llegar esta seña de identidad del Aceite de Orujo de Oliva a los consumidores y a los profesionales”.
Con este objetivo, el esquema de certificación desarrollado por Bureau Veritas consta de once parámetros para medir el desempeño en ámbitos como el consumo responsable de recursos, la eficiencia energética, la economía circular o la trazabilidad del producto. “La diferenciación y la garantía de confianza son algunas de las ventajas de la certificación. A nivel organizativo, ofrece a las empresas una herramienta que mejora la gestión y aporta información estratégica para la adopción de decisiones” ha explicado Julio Hermana García, director comercial de Bureau Veritas.
Identidad visual, equilibrio natural
La identidad visual del sello, realizada en colores verde y blanco, engloba en su icono los conceptos de la aceituna y la economía circular. “La idea surge del equilibrio que consigue el modelo productivo del Aceite de Orujo de Oliva y que recuerda a ciclos que vemos en la propia naturaleza. Este equilibrio lo hemos plasmado en un elemento sintético y geométrico que refleja estabilidad, formalidad y seriedad” ha explicado Pilar Ruiz-Rosas, consultora de marketing estratégico y responsable de la que será la identidad visual del proyecto de ORIVA.
Aprovechamiento integral de la aceituna
El distintivo trasladará al consumidor la garantía de un producto elaborado mediante un proceso medioambientalmente sostenible. Gracias a este proceso, la industria orujera consigue el aprovechamiento integral de la aceituna, haciendo sostenible toda la actividad del olivar. Según datos de la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA), valorados por la Asociación Nacional de Empresas de Aceite de Orujo (ANEO), en la campaña 2021/2022 se han valorizado 6,3 millones de toneladas de alperujo u orujo graso húmedo procedente de las almazaras. Además de Aceite de Orujo de Oliva, el sector obtiene biomasa, compost y otros productos de alto valor añadido para la industria cosmética y farmacéutica.
Sobre ORIVA, la Interprofesional del Aceite de Orujo de Oliva
El Aceite de Orujo de Oliva es un aceite que proviene del olivar. Muy recomendable en fritura por su durabilidad, rentabilidad y sabor neutro. Una opción saludable gracias a su composición rica en ácido oleico y con compuestos bioactivos de alto interés nutricional. ORIVA, la Interprofesional del Aceite de Orujo de Oliva, es una entidad sin ánimo de lucro que representa toda la cadena de valor del producto. Creada en 2015, su finalidad es promover el conocimiento e investigación sobre el Aceite de Orujo de Oliva. España es el primer productor mundial de este producto con una media de 120.000 toneladas anuales de las que exporta el 85%. En la última campaña, contó con 49 centros extractores y 10 refinerías, generando 18.000 empleos y una facturación media de 306 millones de euros. El sector orujero es además un modelo pionero en economía circular y residuo cero. Juega un papel medioambiental clave al transformar de manera integral el orujo graso húmedo -alpeorujo- (subproducto de la extracción del aceite de oliva) en productos de valor añadido entre los que destacan: la biomasa, el compost y los compuestos antioxidantes con aplicaciones en la industria farmacéutica, como el hidroxitirosol y otros fenoles.