Los precios amortiguan la subida de costes de producción en los hortícolas de Almería

La subida de costes en el sector hortícola de Almería está siendo más llevadera gracias a que los precios en origen están acompañando desde el último mes de 2021. No obstante, la «producción ha caído como consecuencia del frío», como señalan desde el sector.

Por José Esteban Ruiz, periodista agroalimentario

En los últimos años, este periodo había sido fatídico para los bolsillos de gran parte de los agricultores, que se vieron arrastrados a vender sus productos, en algunos casos, por debajo de los costes de producción.

Sin embargo, desde las fechas prenavideñas, ya desde la recta final de noviembre, en esta ocasión, las cotizaciones de las frutas y hortalizas que se cultivan en esta zona bajo abrigo, repuntaron y, tanto a juicio de los representantes de los agricultores (ASAJA y COAG) como de gran parte de la comercialización (COEXPHAL) «han sido precios aceptables».

Sin embargo, el volumen de producción este año está siendo «inferior al de campañas anteriores» si nos ceñimos al periodo analizado, debido a la acción de las bajas temperaturas. Un hecho este que influye a la baja en el resultado final de los agricultores.

Ambas parte coinciden que esta estabilidad está siendo clave para soportar la elevada subida de los costes de producción que se están registrando tanto en los invernaderos, en el proceso de cultivo; como en la actividad que se desarrolla en los almacenes, en donde, según Luis Miguel Fernández, gerente de COEXPHAL, por ejemplo, «se afronta, en el último mes, un gasto superior al 30% respecto al mismo periodo de la anterior campaña, en el cartón utilizado para la confección del producto».

Hortalizas como el pepino, que en años precedentes había sufrido diferentes crisis en el mercado durante esta época, en la presente campaña está alcanzando precios que rentan en la actividad, marcando valores que se sitúan sobre los 0,80 euros por kilogramo, de media, superando en ocasiones el euro. Calabacín o berenjena, han registrado valores por encima del euro, incluso acercándose a los dos euros por kilogramo, en momentos puntuales.

Desde ASAJA, su secretaria general, Adoración Blanque, explica que la primera mitad de diciembre, los precios se elevaron debido, por un lado a la regulación de la producción a causa de la bajada de temperaturas; y también, por otro lado, a la mayor demanda registrada por los clientes en destino derivada del anuncio de huelga en el sector transportes. Sin embargo, como puntualizó el gerente de COEXPHAL, posteriormente, una vez suspendida esta huelga, y en el periodo navideño, «los precios descendieron al reducirse los pedidos». No obstante, una vez pasado este periodo en el que, por temor a la huelga, los clientes habían sido previsores, y por tanto, aumentado sus pedidos, las cotizaciones volvieron a subir, ya entrado el mes de enero.

Otro de los motivos en esta regulación del mercado, que señala Adoración Blanque, hace referencia al gasto energético. «En zonas competidoras en las que se utiliza masivamente la energía eléctrica para producir se han visto reducidos los cultivos, ya que no compensa ese gasto en la comercialización del producto».

Precios estables

En general, la secretaria general de ASAJA aclaró que «no son precios desorbitados los que se están registrando, pero sí son estables que le permiten a los productores soportar de alguna forma la subida de costes que se está produciendo esta campaña».

Los productos hortofrutícolas que, a pesar de mantener una estabilidad en sus valores, no están registrando subidas como las del resto, son el pimiento y el tomate, a pesar de que en este último se ha vuelto a ver reducida la superficie en cultivo almeriense en esta campaña.

Sobre el pimiento, el secretario provincial de COAG Almería, Andrés Góngora, comenta que «no termina de despuntar en el apartado de cotizaciones». A su juicio, se está poniendo de manifiesto este incremento de superficie en cultivo acumulado en las últimas campañas, a pesar de que, este año, debido a la climatología, «el ritmo de maduración no está siendo alto».

Sobre el tomate, Góngora valora que «no tiene mal precio», pero «es que no hay mucho». Además, según avanza, por otra parte, el gerente de COEXPHAL, Luis Miguel Fernández, «en tomate, Almería mantiene una buena práctica colectiva frente al rugoso, manteniendo medidas preventivas que se están notando con buenos resultados, mientras que en otras zonas competidoras  están teniendo muchos problemas con este virus».

COVID-19

Al margen de los precios, demanda, oferta, etcétera, el sector hortofrutícola, principalmente en el sector comercializador, se está viendo afectado, en su día a día, por la falta de personal para hacer frente a la confección de pedidos y demás tareas que se desarrollan en los almacenes, apunta Luis Miguel Fernández.

La principal causa es la pandemia. Se están registrando numerosas bajas en las plantillas de las cooperativas y demás empresas y eso está haciendo que «sobre todo las pequeñas y medianas estén teniendo muchos problemas para sacar adelante los pedidos, en muchos casos porque se producen retrasos en las altas». Asimismo, «estamos notando un elevado nivel de absentismo laboral en el último mes que está dificultando la actividad en los almacenes».