La creación agraria no para: cada semana sale un nuevo invento para el campo
El fin de los inventos es facilitar la labor del agricultor en su día a día, destacando artilugios destinados a la recolección de cosechas o para el manejo y alimentación del ganado.
En los últimos 20 años, la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM) ha recibido la solicitud de inscripción de 1.392 inventos, lo que supone una media de casi 70 anuales, según los datos facilitados a Efeagro.
Desde principios de siglo, 2005 fue el año más productivo, con 84 inventos; seguido por 2004, cuando se registraron 82. El año menos activo con diferencia fue justo el ejercicio anterior, 2019, cuando llegaron a la OEPM tan sólo 42 creaciones destinadas al sector primario.
Por regiones, Andalucía es la más innovadora, con 234 inventos registrados en su territorio desde 2000; seguida por Cataluña (232), Madrid (158) y Comunidad Valenciana (136).
Los inventores pueden ser personas privadas, empresas o instituciones como universidades, según la documentación analizada.
Ejemplos de inventos
El sector del olivar suele ser objeto de invenciones como la que se registró en 2015 de una máquina que optimiza la aplicación de productos fitosanitarios sobre el árbol.
Fue presentada al 50 % por la Universidad de Córdoba y el otro 50 % por una empresa privada valenciana y permite esa mayor eficiencia porque el equipo fumigador utiliza un turbo-atomizador con capacidad adaptativa, de manera que se aplica el producto sólo allí donde se encuentra el árbol, adaptándose a la geometría de cada copa.
Este sistema vino a solventar los problemas que existían hasta entonces en los aparatos que esparcían el producto de una forma menos precisa por lo que no se aprovechaba del todo e incrementaba el coste de la operación.
Para la vid, se registró hace varios años un sistema nuevo de sujeción de los alambres de hierro.
Ya se conocían postes para sujetar los alambres que sirven de soporte para las plantas pero daban problemas de retención y se podían desprender involuntariamente o accidentalmente.
Lo que esta innovación propone es un nuevo poste que ofrece mejor adhesión porque forma parte de los estructurados en un cuerpo metálico alargado con muchos ganchos que ayudan a tal fin.
Recientemente, se presentó otra solicitud de patente para una carpa recolectora de frutos de doble uso que también aporta una mejora de la técnica existente.
Se trata de una plataforma dotada de muchas varillas que sustentan una red, a modo de paraguas invertido, para hacer caer sobre ella el producto, según recoge el texto presentado a la OEPM.
La carpa ofrece la particularidad, respecto a los inventos anteriores, de estar dotada de una red con una serie de piezas complementarias que permiten doblarse para permitir el acercamiento de personas al árbol.
En el diseño convencional, la lona o red quedaba totalmente tensada y extendida bajo el árbol e impedía al agricultor acercarse a su base si era necesario.
En el mundo ganadero
El mundo de la ganadería no es ajeno a todo esto y, por ejemplo, recientemente se presentó una solicitud para patentar un remolque repartidor de pacas y pienso para alimentar al ganado extensivo, y que es arrastrado por un tractor agrícola o incluso por un turismo.
En este caso, el sistema facilita un reparto más homogéneo y adecuado del alimento que permite a los animales tener las mismas disponibilidades.
Los anteriores inventos relacionados no aseguran esa distribución tan equitativa y, además, requerían recargarlos de forma frecuente.
Son algunos ejemplos de esa inventiva que no para en el mundo del campo y, aunque normalmente son mejoras de artilugios ya existentes, permiten dar un paso hacia adelante para hacer de la agricultura y la ganadería una labor más fácil, llevadera, eficiente y rentable.