Feragua pide que se habiliten pozos de emergencia
La Asociación de Comunidades de Regantes de Andalucía (Feragua) ha pedido en la Comisión de Desembalse de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir celebrada ayer un plan de medidas de apoyo que contribuya a reducir el fuerte impacto de la sequía en los regantes y agricultores andaluces y de la situación hidrológica en la comunidad, que es de especial gravedad en la cuenca del Guadalquivir.
En este sentido, ha pedido que se incluya en el Decreto de Sequía de esta cuenca medidas paliativas y compensatorias de tipo económico y fiscal, como la condición de cánones y tarifas de riego para 2023, las exenciones de IBI’s y otras medidas de orden fiscal, algunas ya previstas por la CHG, pero también otras medidas de tipo laboral que faciliten los posibles ERTEs por parte de las comunidades de regantes ante la falta de actividad en esta campaña de riego.
De hecho, hay zonas regables como Bembézar-Retortillo y Sierra Boyera, que van a tener dotación superficial cero, y la mayoría tendrá dotaciones muy reducidas, por lo que se necesita que la falta de agua pueda considerarse como causa justificada para las regulaciones de empleo y sea así admitida por la autoridad laboral.
Junto a estas medidas paliativas que se pueden adoptar para aliviar el daño que sufrirá el regadío y el sector agrícola en Andalucía, Feragua ha pedido otras medidas de gestión que son imprescindibles para poder aliviar los efectos de la sequía, como la disponibilidad de pozos de emergencia para poder salvar los cultivos de arboleda, o la agilización de otras herramientas de cesión de derechos del agua, para facilitar el mejor uso posible de los escasos recursos disponibles.
Entre ellas, emprender algunas obras a corto plazo que permitan disponer de nuevos recursos, como conexiones de estaciones depuradoras y desaladoras a punto de consumo, y algunos proyectos de emergencia que afectan al regadío, como, por ejemplo, la toma de la comunidad de regantes del canal de Jabalcón en Granada, el proyecto de mejora del canal de entrada y acondicionamiento del bombeo de la presa de Arenoso, en Córdoba; el proyecto de puesta en marcha y acondicionamiento de la estación de bombeo de Bajo Guadalquivir al embalse de Torre del Águila, en Sevilla; y el proyecto de mejora de la operatividad funcional del tramo común del Bajo Guadalquivir, también en Sevilla.
Además, con vistas a un corto-medio plazo, Feragua ha demandado el desarrollo y puesta en marcha de un plan de balsas de riego que permita a los regantes y agricultores aprovechar las aguas procedentes de escorrentías y disponer de nuevos recursos para regar los cultivos en sus zonas regables; una iniciativa que daría tiempo a ejecutarse en un año y podría ser clave para la próxima campaña de riego en Andalucía.
Igualmente, Feragua ha vuelto a insistir en la necesidad de acometer las obras y proyectos de regulación para presas y embalses ya aprobados en los anteriores planes hidrológicos, que necesitan de un impulso y agilización que ya se está convirtiendo en urgente, así como en poner en marcha ambiciosos planes relacionados con la regeneración de aguas residuales y la desalación que permitan disponer a los regantes de nuevos recursos alternativos, especialmente en el litoral andaluz.
Por último, Feragua ha pedido a la Junta de Andalucía que se sume, en la medida de sus competencias, a las medidas de apoyo al sector del regadío y la agricultura en nuestra comunidad, que son clave para que las terribles pérdidas que tendrá el sector este año al menos sean aliviadas a los regantes y productores.