España espera una solución sobre el veto de la UE a la pesca de fondo
El ministro español de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, espera que la Comisión Europea abra una vía de diálogo que permita llegar «a un punto de vista razonable» sobre la propuesta de prohibir toda la pesca de fondo en 94 áreas de España, Portugal, Francia e Irlanda.
España e Irlanda votaron el martes contra la propuesta de la DG Mare de vetar la pesca de fondo en 94 zonas del atlántico norte para proteger ecosistemas marinos durante una sesión en la que otros once países se abstuvieron mientras 14 votaban a favor.
España cree perfectamente posible la protección de mares y océanos con la capacidad extractiva que supone la pesca», sostuvo el ministro.
En ese sentido, puso como ejemplo las 13 reservas marítimas de interés pesquero de unas 102.000 hectáreas que existen en el país, «donde se lleva a cabo actividad pesquera y al mismo tiempo se protege al medioambiente».
«Tenemos experiencia sobre la materia y yo espero que la Comisión Europea entre en una vía de diálogo que permita llegar a un punto de vista razonable», añadió.
Se refirió también al caso del Gran Sol -una de las zonas afectadas por la propuesta de la DG Mare- , «donde los marineros y pescadores españoles, que llevan dos siglos, han permitido que el hábitat marino y la biodiversidad continúe viva, y que ahora vean restringido su capacidad de acceso me parece que hay que hablarlo». Por ello, dada la importancia del tema «tenemos que hablarlo, buscar soluciones, medios y flexibilidades», añadió Planas.
EL SECTOR PESQUERO LO CONSIDERA LAMENTABLE
El presidente de la Coalición Internacional de Asociaciones Pesqueras, Javier Garat, tildó lo sucedido ayer de «lamentable».
«La Comisión Europea lleva mucho tiempo intentando dar vueltas a este acto de ejecución para cerrar un montón de zonas supuestamente para proteger los ecosistemas marinos vulnerables», dijo en declaraciones a Efe en Lisboa.
Garat, también secretario de la Confederación Española de Pesca, considera que la Comisión no ha realizado una consulta adecuada al sector pesquero, ha interpretado a los científicos de una manera «muy peculiar» y «se han basado en datos de los buques de arrastres de fondo de los cuatro países, pero no en otros como los busques de palangre de fondo o de anzuelo».
«Vamos a seguir insistiendo a la Comisión Europea y a los Estados miembros de que esto no es forma de proceder. Estamos dispuestos a aportar los datos necesarios de nuestros barcos para contrastar la información, sentarnos y ver dónde hay que proteger», concluyó.