“Es necesario reforzar los mecanismos de entrada de las exportaciones”
El presidente del sector de frutas y hortalizas de Cooperativas Agro-alimentarias de España, Cirilo Arnandis participó en el Comité Mixto Francia-España-Italia-Portugal de frutas y hortalizas celebrado en París y que este año centró buena parte de la discusión en las preocupaciones y retos del sector hortofrutícola con respecto a cuestiones fitosanitarias.
En relación con el desarrollo de la nueva normativa comunitaria de protección fitosanitaria que entrará en vigor en diciembre de 2019, el sector reiteró la necesidad de reforzar los mecanismos actualmente en vigor para evitar la entrada de organismos nocivos en la UE por la vía de las importaciones de frutas y hortalizas desde países terceros contaminados.
En el caso particular del sector de los cítricos, los representantes del sector europeo reiteraron las demandas suscritas en el Grupo de Contacto celebrado este año en Córcega, sobre la necesidad de nuevas medidas, teniendo en cuenta la amenaza de la enfermedad de la “Mancha Negra”, que se ha agudizado tras las interceptaciones detectadas en producto procedente de Turquía en abril.
La atención de las administraciones y el sector se centró también en los retos que implica la transición de la producción hortofrutícola europea hacia un uso más sostenible de los productos fitosanitarios, tal y como están demandando los consumidores y la opinión pública. Las organizaciones presentes comparten la demanda, y pidieron un reconocimiento de los esfuerzos que el sector ya está haciendo en el uso sostenible de fitosanitarios, y solicitaron a las administraciones mayores esfuerzos para poner a disposición herramientas de lucha fitosanitaria que ayuden a que la oferta de frutas y hortalizas sea segura, respetuosa con el medioambiente y la vez técnicamente viable y competitiva. Esta es una reclamación recurrente que se ha reproducido en los 6 grupos de contacto (ajo, fresa, tomate, manzana, melocotón y cítricos) celebrados durante el año y cuyas conclusiones fueron presentadas en la sesión plenaria. En particular, se considera que las administraciones deberían redoblar sus esfuerzos para agilizar y homogeneizar los sistemas de reconocimiento mutuo y de ampliación para usos menores, al tiempo que se destaca la importancia de los esfuerzos tanto públicos como privados para lograr métodos y prácticas alternativas a través de la investigación.
Otro tema de relevancia que fue abordado en la sesión plenaria del Comité fue la repercusión de la PAC post-2020 sobre el sector de frutas y hortalizas. Por parte del sector se reclamó un trato más equitativo entre sectores, y en particular, que las frutas y hortalizas reciban un apoyo proporcional a su contribución al empleo, al medio ambiente y al desarrollo rural, al tiempo que se lamentó que la propuesta de la Comisión no haya reforzado las medidas de gestión de crisis grave. Cooperativas Agro-alimentarias destacó con satisfacción la decisión de la Comisión de plantear, en su propuesta de 2018, como han defendido las organizaciones de cooperativas, el mantenimiento del régimen específico de ayudas a las frutas y hortalizas, basado en la financiación de los programas operativos (PO) de las organizaciones de productores económicas, si bien se ha llamado la atención sobre el riesgo de incrementar las obligaciones medioambientales dentro de los PO o de acotar la aplicación del principio de subsidiariedad.
En relación con las crisis que está atravesando varias producciones hortofrutícolas, además de reclamar medidas de gestión dentro de la PAC, todos lo representantes coincidieron en denunciar la congestión creciente y deterioro del mercado comunitario como consecuencia de que las puertas de la UE están cada vez más abiertas a la penetración de producto de terceros países, amparado por sucesivos acuerdos comerciales. Unos acuerdos comerciales que utilizan a las frutas y hortalizas como moneda de cambio y permiten la entrada de producto muy competitivo gracias a que en origen no está sometidos a las condiciones (laborales, medioambientales) que sí aplican en la UE.
En la reunión, el representantes de Cooperativas Agro-alimentarias de España, Cirilo Arnandis, señaló que en contraposición a esa situación de “puertas abiertas” existe una debilidad en la posición ofensiva de la política comercial de la UE, y ha lamentado que la Comisión no tenga un papel preponderante en la apertura de mercados de países terceros y sea cada Estado miembro, quien se enfrenta en solitario a la negociación de “protocolos de exportación”, producto a producto, país a país… Como conclusión de la reunión, y en relación con la discusión sobre la política comercial comunitaria, los representantes de los cuatro ministerios han acordado remitir un escrito conjunto a la Comisión Europea en el que se expondrán las preocupaciones emitidas por los profesionales en relación a los acuerdos comerciales entre la Unión Europea y los países terceros y reivindicarán el principio de reciprocidad.