Bruselas impulsa un código de conducta para una alimentación sostenible
La Comisión Europea (CE) presentó el nuevo código de conducta sobre prácticas comerciales y empresariales responsables en el sector alimentario cuyo fin es aumentar la disponibilidad y hacer asequibles opciones saludables y sostenibles con el medio ambiente y que ya recoge 65 firmas.
Esas 65 asociaciones y empresas firmantes se comprometieron a contribuir a una transición sostenible y animaron a compañías similares a unirse al código, considerado por la comisaria europea de Salud y Seguridad Alimentaria, Stella Kyriakides, “una solución innovadora”, según afirmó hoy en la presentación del mismo.
En su opinión, el código, “uno de los primeros resultados de la estrategia De la granja a la mesa”, refleja “la voluntad” de la industria alimentaria de “actuar para mejorar la salud” de los ciudadanos y del planeta, lo que puede ayudar en la transición hacia un sistema alimentario sostenible, agregó.
Entre los signatarios se encuentran 26 fabricantes de alimentos, 14 minoristas de alimentos, uno del sector de servicios alimentarios y otras 24 asociaciones, ya que este código abarca a los actores de “toda la cadena alimentaria”, señaló el vicepresidente ejecutivo de la CE para el Pacto Verde, Frans Timmermans.
El político neerlandés anunció que la Comisión lo presentará en la cumbre de Sistemas Alimentarios de las Naciones Unidas, que se celebrará este año, evento que aprovechará para invitar a otras empresas a suscribirlo y poder “aumentar la ambición” del proyecto.
Según el vicepresidente, la UE debe “reducir las emisiones de gases de efecto invernadero” y frenar “urgentemente” la pérdida de biodiversidad relacionada con la producción de alimentos para dar forma “pronto” a un sistema alimentario que facilite la elección de una dieta sana y sostenible.
El código fue elaborado por la CE con las asociaciones y empresas de la Unión Europea (UE), con la participación activa y las aportaciones de otras partes interesadas, como organizaciones internacionales, ONGs y sindicatos, entre otros, que también participaron en la presentación del código.
“Tenemos que ser sinceros, la transición hacia un ecosistema agroalimentario sostenible va a ser dura, especialmente para las pymes”, sostuvo hoy el titular europeo de Mercado Interior, Thierry Breton, a lo que se comprometió a que la UE movilizará sus recursos para apoyar a las pequeñas empresas a que puedan encontrar socios comerciales y proveedores sostenibles.
Asimismo, destacó que la digitalización “va de la mano” con la transición ecológica y adelantó que “tiene en mente” un programa que promoverá “la transferencia de conocimientos de las empresas tecnológicas a formas más tradicionales”.
También intervino en el encuentro digital el presidente del grupo de trabajo sobre el Código de Conducta, Dirk Jacobs, quien se congratuló de que el código “ha propiciado un entendimiento mutuo entre los actores”.
“El código está ahora abierto a la firma de diferentes asociaciones a lo largo de la cadena de suministro que deseen presentar una contribución concreta o un compromiso ambicioso en nombre de sus miembros. También son bienvenidas aquellas empresas que deseen mostrar liderazgo y sostenibilidad”, subrayó Jacobs.
El sistema incluye dos niveles de compromisos: las asociaciones de la UE se responsabilizan de cumplir siete objetivos que promueven el cambio hacia modelos de consumo saludables y sostenibles y deben informar sobre los progresos realizados anualmente.
Las empresas, por su parte, seguirán un marco de compromisos ambiciosos con resultados medibles que abarca desde el bienestar de los animales hasta la reducción del azúcar y la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero en toda su gama de productos e informarán anualmente de su cometido con carácter anual.
La estrategia “De la granja a la mesa” es parte integrante del Pacto Verde europeo, el cual establece una visión a largo plazo para transformar la producción, distribución y consumo de los alimentos.