El producto agroalimentario español hace tiempo que desterró complejos. El sector recorre caminos paralelos a la explosión del deporte de este país. Los primeros puestos en las competiciones deportivas de numerosas disciplinas dejaron de ser una barrera a golpe de balón, canasta, motor o raqueta. El fútbol, el baloncesto, la Fórmula 1, el motociclismo o el tenis tienen sus nombres: Iniesta, Gasol, Alonso, Márquez o Nadal. A la boca, otros “nombres” se distinguen en la mesa y rompen las fronteras de los mercados internacionales: aceite de oliva, vino, jamón y derivados cárnicos, conservas o frutas y verduras. Los 160.000 visitantes de Anuga han sido testigos.