Aumenta el uso de los fertilizantes líquidos
Sus ventajas frente al abono sólido han generado un aumento del interés en los agricultores, que deben contar con maquinaria específica para su correcta aplicación. Los pulverizadores hidráulicos ganan peso en el sector.
Por Juan Herrera, periodista agroalimentario / @jherrerarenas
Los abonos o fertilizantes líquidos se diferencian de los sólidos, principalmente, por su forma de aplicación en el campo, aunque también puede variar la velocidad de incorporación y asimilación de nutrientes en el suelo ya que, en el caso de los líquidos, al aplicarse directamente o disueltos en agua, se consigue una rápida absorción.
En este sentido, los fertilizantes en forma líquida presentan muchas ventajas en relación con los sólidos. Junto a una más rápida absorción -ya que en los abonos granulados se debe esperar a que el producto se disuelva en el agua del suelo, proceso que en momentos de sequía puede tardar bastante-, destaca la uniformidad de aplicado, que también es mayor debido a la maquinaria que se utiliza.
Además, el precio de los fertilizantes líquidos es menor por la misma cantidad de nutrientes, lo cual unido a todo lo anterior ha provocado un aumento de su uso en los últimos años.
Composición
Los elementos primarios que incorporan este tipo de abonos son el nitrógeno, el fósforo y el potasio, si bien, dependiendo del tipo de fertilizante y composición, añade otros microelementos.
Así, tal y como recoge la web especializada Agroptima, como ocurre en todos los abonos, en los fertilizantes líquidos también se puede distinguir entre fertilizantes de fondo o NPK y fertilizantes nitrogenados líquidos o de cobertera. Igualmente pueden llevar también micronutrientes como el azufre, boro, molibdeno, etc…
Clasificación
Los fertilizantes o abonos líquidos pueden clasificarse según varios factores. En el caso concreto del tipo de absorción de la planta, existen dos grandes tipos:
- Fertilizantes líquidos de absorción radicular, que se aplican al suelo para que la planta los pueda absorber por las raíces.
- Fertilizantes líquidos de absorción foliar, pensados para que la planta los absorba por las hojas en estadios avanzados del cultivo.
Según su presentación en el mercado, pueden encontrarse:
- Suspensiones o mezclas: en este tipo de fertilizante líquido hay abono sólido, normalmente en polvo, disperso por un medio líquido pero no disuelto del todo. Esto hace que el abono pueda no ser homogéneo y que se pueda aposentar el sólido en la parte baja del depósito.
- Soluciones: es el tipo de fertilizante líquido más común. Se trata de elementos sólidos que se han disuelto completamente en un medio líquido y de forma homogénea.
Maquinaria específica: pulverizadores hidráulicos
Las características singulares de este tipo de fertilizante requieren de una maquinaria específica para su correcta aplicación. En este caso, se utilizan pulverizadores hidráulicos, compuestos por sistemas de bombeo y boquillas de pulverización, y que se caracterizan por la uniformidad que se puede conseguir en la distribución sobre la superficie tratada, gracias al solapamiento de las boquillas contiguas.
Elementos principales
De acuerdo con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), los elementos principales de la maquinaria destinada a la aplicación de abonos y fertilizantes líquidos son:
- Depósito para el caldo que contiene el producto mezclado con el diluyente, resistente y fácil de limpiar, con un sistema de vaciado total y boca de llenado dotada de cierre hermético.
- Bomba volumétrica que asegure la impulsión con independencia de la presión de trabajo (generalmente de pistón o de membrana).
- Sistema de regulación proporcional: caudal proporcional al motor (CPM) o proporcional al avance (CPA), con manómetro indicador de la presión de trabajo y tuberías que alimentan los diferentes tramos de boquillas.
- Sistema de barras portaboquillas plegable, que cubre extendido toda la anchura de trabajo, sobre el que se sitúan las boquillas de pulverización.
- Boquillas apropiadas para el tipo de producto que se aplica:
- Tipos normales: abanico, hendidura o chorro plano, turbulencia o chorro cónico, deflectoras o de choque.
- Tipos especiales: baja deriva con o sin inyección de aire.
- Materiales resistencia al desgaste (termoplástico o cerámica).
- Filtros escalonados con tamaño de malla adecuado al tipo de boquillas utilizado.
Tipologías
En relación a los pulverizadores hidráulicos, el abanico de tipología depende de diferentes parámetros:
- Anchura de trabajo: 8 a 40 metros (se recomienda que las anchuras sean múltiplo impar de la anchura de siembra).
- Accionamiento: toma de fuerza 540 y 1000 revoluciones por minuto.
- Dosificación: caudal proporcional al motor (CPM) o caudal proporcional al avance (CPA); caudal constante
- Masa en vacío: suspendidos: 200 a 1000 kg; arrastrados: 1000 a 2500 kg.
- Elementos auxiliares: mezclador de productos, marcadores de espuma, depósito de agua limpia y para limpieza de la cuba.