Andalucía recibe el reconocimiento europeo a su RAIF
La Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible ha recibido el reconocimiento a una de sus herramientas en materia de lucha contra las plagas y enfermedades de productos vegetales. Se trata de la Red de Alerta e Información Fitosanitaria de Andalucía (RAIF) que ha sido reconocida por el programa de cooperación Interreg Europe como ejemplo de buena práctica de política pública en materia de digitalización de la cadena de valor agroalimentaria.
Además, ha sido incluida en la Plataforma de Aprendizaje sobre Políticas Europeas que el programa Interreg Europe pone a disposición de autoridades políticas de toda Europa para su consulta, intercambio de experiencias y aprendizaje.
Los expertos de la Plataforma de Aprendizaje sobre Políticas Europeas han resaltado que esta iniciativa ilustra cómo un sistema de información agrícola puede promover prácticas sostenibles con una gestión de los pesticidas y un uso de productos fitosanitarios más eficiente e integrado. Esta buena práctica reconocida a nivel europeo puede inspirar así a otras regiones europeas que tengan en su PIB a la agricultura como sector relevante, como es el caso de Andalucía.
La Consejería de Agricultura, que lidera el proyecto de cooperación europeo Regions 4Food, eligió la RAIF junto con otras iniciativas públicas andaluzas para mostrarla a los socios del proyecto por su potencial de transferencia en el proceso de aprendizaje conjunto. Este proyecto está formado por siete socios de regiones europeas que a través del intercambio de experiencias y aprendizaje mutuo, están trabajando en fomentar la innovación de la cadena de valor agroalimentaria, impulsándola a través de instrumentos de política regionales financiados con fondos estructurales. El proyecto comenzó el 1 de junio de 2018 y tiene prevista su finalización el 31 de mayo de 2023.
La RAIF es una herramienta de seguimiento fitosanitario de los principales cultivos de Andalucía que la Junta pone a disposición de agricultores y técnicos. Los datos fitosanitarios son recogidos por productores y técnicos de campo y procesados para así proporcionar información relevante a los agricultores con el objeto de contribuir a prácticas agrícolas sostenibles.
Esta iniciativa andaluza requiere una fuerte colaboración entre centros de conocimiento y usuarios finales, en este caso los propios agricultores, y el acceso a datos recogidos en las zonas de producción.