Agrópoly, para conocer más a la agricultura y su función ambiental
Cuando comemos una zanahoria ¿Sabemos de qué parte de la planta nos estamos alimentando? ¿Tenemos idea de dónde es originario, el arroz o la patata? ¿Qué es la economía circular? Probablemente si lanzásemos estas preguntas a la mayoría de la población, las respuestas serían poco menos que controvertidas. Y es que, generalmente, los llamados urbanitas, personas que viven en grandes ciudades y que son ajenas a lo que se cuece en los entornos rurales, desconocen la labor del agricultor y la importancia que tiene su trabajo para asegurar la alimentación a nivel mundial, sin comprometer al medio ambiente. Por esta razón y para dar a conocer en qué consiste la agricultura y cuál es su implicación ambiental, la Asociación Empresarial para la Protección de las Plantas (AEPLA) y el Sistema de Recogida de Envases Agrarios (SIGFITO) crean Agrópoly, un juego interactivo basado en preguntas y respuestas que pretende educar y concienciar a la sociedad sobre el importante oficio de ser agricultor.
¿Cómo jugar al Agrópoly?
Es tan fácil como entrar en la web http://www.agropoly.org Como punto de partida, cada jugador dispone de una finca con una nave y agua abundante. El objetivo es conseguir una buena cosecha de naranjas, pero para lograrlo, necesitará semillas, fertilizantes, fitosanitarios, etc. que sólo podrá adquirir si responde correctamente a las preguntas del Agrópoly. Cuantas más se acierten, más cerca se estará de producir naranjas. Si no lo consigue a la primera, cada jugador lo puede intentar cuantas veces quiera.
La visibilidad rural y el reciclaje
Tanto AEPLA como SIGFITO son entidades que emprenden distintas iniciativas para visibilizar la agricultura.
AEPLA es la voz de la industria fitosanitaria. Las empresas que representa investigan y desarrollan soluciones destinadas a la sanidad vegetal (las medicinas de las plantas) que permiten a los agricultores proteger sus cultivos de plagas, enfermedades y malas hierbas. Se garantiza así un suministro suficiente de alimentos sanos, seguros y asequibles para todos.
El sistema de recogida lleva cerca de 20 años trabajando para que el campo español esté libre de envases. Los agricultores una vez que han consumido sus productos de fertilizantes, nutricionales, bioestimulantes y fitosanitarios deben comprobar que tienen el símbolo de SIGFITO y depositarlos limpios en los cerca de 5.000 puntos de recogida que tiene la red de SIGFITO en toda España. Allí, solicitan un albarán para justificar su cumplimiento con la ley. Posteriormente los puntos de recogida, que son en su gran mayoría establecimientos de venta de productos agrarios y cooperativas, solicitan la recogida a través de la web de SIGFITO y un gestor se los lleva a una planta para su posterior tratamiento.