“Garantizar la soberanía alimentaria de Europa es tan importante como su defensa”
COAG Andalucía defiende la soberanía alimentaria y exige al Gobierno y a la UE que tomen medidas de inmediato para proteger la alimentación de los europeos y su tejido productivo, el único en el mundo que garantiza la seguridad alimentaria y en un marco de sostenibilidad y compromiso medioambiental.
Ante los cambios que se están produciendo tras la irrupción en la escena política mundial del nuevo presidente de EEUU, Donald Trump, quien ha puesto “patas arriba” el modelo económico y de mercado, regulado por la Organización Mundial del Comercio -OMC-, así como la Alianza Atlántica -que no sólo contemplaba colaboración en defensa, sino económica y comercial-, la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) de Andalucía cree necesario dar la voz de alarma con un mensaje claro y contundente: Europa está obligada a garantizar la soberanía alimentaria, que es ahora tan prioritaria e importante como la defensa de su territorio.
Por ello, COAG Andalucía exige al Gobierno y a la UE que tomen medidas de inmediato para proteger la alimentación de los europeos y su tejido productivo, el único en el mundo que garantiza la seguridad alimentaria y, además, en un marco de sostenibilidad y compromiso medioambiental.
En este sentido, esta organización agraria pone en valor que la agricultura y la ganadería de Europa responden a un modelo social y profesional que produce alimentos sanos, de manera eficiente, innovadora y sostenible, destacando además su papel clave en la creación de empleo, riqueza y de gestión del territorio. Un tejido productivo que puede perfectamente garantizar la soberanía alimentaria de Europa con los alimentos más sanos del mundo.
Para COAG Andalucía, estamos en un momento clave de cambio en el que es determinante que el Gobierno de España y toda la UE actúen sin demora y defiendan y protejan el modelo social y profesional de agricultura que garantiza la soberanía y la seguridad alimentaria de los europeos, porque no sólo está en juego en estos momentos la defensa territorial, sino el control de las energías y la alimentación de los ciudadanos. Ahora no hay excusas, hay que actuar y proteger nuestro tejido productivo.
Por último, esta organización agraria destaca que el mercado europeo representa a 500 millones de habitantes con alto poder adquisitivo y eso es tan estratégico que se debe cuidar. «No tiene sentido traer naranjas o almendras de fuera y las nuestras tiradas en los campos. Es cierto que los acuerdos comerciales con países terceros son necesarios, pero con sentido común».