Desafíos y soluciones en la sostenibilidad agrícola: la conservación del suelo como prioridad
El estado actual de pérdida de suelo cultivable y la sostenibilidad agrícola representa uno de los desafíos más significativos para la seguridad alimentaria global y el equilibrio ambiental.
Por; Juan Vicente Beneitez, Responsable de marketing para Europa de Biome Makers
Esta pérdida de suelo fértil amenaza la capacidad de la agricultura para alimentar a una población en constante crecimiento. Para abordar este problema, es crucial adoptar prácticas agrícolas sostenibles que promuevan la conservación del suelo; de lo contrario, nos enfrentaremos a un futuro donde la seguridad alimentaria y la salud del planeta estarán en grave riesgo.
Varias prácticas de gestión pueden promover la conservación del suelo, incluidos los cultivos de cobertura, el manejo integrado de plagas y la aplicación de insumos biológicos, entre otros. Sin embargo, ¿cómo identificamos cuáles son las mejores prácticas de gestión para implementar en cada explotación? Para hacer esto, necesitamos saber cómo evoluciona la biología del suelo en tipos de cultivos específicos.
El microbioma del suelo puede ofrecer información detallada sobre la adaptación al estrés, la promoción del crecimiento de las plantas y los riesgos de enfermedades, conocimientos clave para aumentar la productividad y la resiliencia de los cultivos. Es fundamental que comprendamos cómo se relacionan entre sí los microorganismos que viven en el suelo y qué funciones tienen. El análisis biológico del suelo emerge como un gran primer paso hacia la conservación del suelo.
La preservación del suelo cultivable y la promoción de la sostenibilidad agrícola son primordiales para garantizar la seguridad alimentaria
Tecnologías innovadoras como BeCrop® comparan el ADN de los microorganismos y utilizan la inteligencia artificial para calcular índices que nos proporcionan información sobre la nutrición y la prevención de enfermedades. Los análisis biológicos del suelo se utilizan en todo tipo de cultivos para analizar qué sucede al usar un insumo, es decir, qué impacto real tienen los insumos en el suelo y los cultivos. También se pueden utilizar para averiguar qué práctica agrícola funciona mejor o estimula las funciones de los microorganismos que viven en el suelo.
Además, estos análisis pueden emplearse para obtener información sobre cuán sostenible es una finca y cómo podemos hacerla más sostenible, productiva y resistente a condiciones climáticas extremas. Por ejemplo, ECOM en Costa Rica logró una calificación de sostenibilidad del suelo utilizando BeCrop® Rate para identificar fincas de alto rendimiento y señalar áreas de mejora.
La Finca Schevichoven en los Países Bajos utilizó este índice global de salud del suelo para demostrar sus prácticas regenerativas y mostrar a la comunidad cómo los análisis de suelos proporcionan información valiosa para apoyar la sostenibilidad de la finca con el objetivo de la adopción de prácticas regenerativas. Invertir en la comprensión y el manejo inteligente de la biología del suelo es fundamental para preservar la seguridad alimentaria y promover la sostenibilidad a largo plazo en la agricultura global.
En conclusión, la preservación del suelo cultivable y la promoción de la sostenibilidad agrícola son primordiales para garantizar la seguridad alimentaria y el bienestar ambiental a escala global. Al implementar prácticas sostenibles y aprovechar los avances en el análisis de la biología del suelo, podemos mitigar los efectos de la degradación del suelo y seguir un camino respaldado por datos para conseguir un sistema agrícola más resiliente.
A través de la investigación continua, la innovación y la colaboración, podemos proteger los recursos naturales para las generaciones futuras a la vez que cumplimos con las demandas de una población en crecimiento. Es imperativo que prioricemos la salud de nuestros suelos mientras avanzamos hacia un futuro más sostenible y seguro en términos alimentarios.
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