Sostenibilidad económica para lograr la medioambiental en la agricultura
Representantes de Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos se han desplazado a Bruselas para celebrar encuentros con responsables políticos, tanto del Parlamento como de la Comisión Europea, a los que han trasladado el mensaje de que “antes de lograr la sostenibilidad ambiental hay que tener muy en cuenta la sostenibilidad económica y social de las explotaciones agrarias”.
“Gran parte de las iniciativas legislativas europeas que se están negociando emanan del Pacto Verde Europeo y de la Estrategia de la Granja a la Mesa, y vemos cómo, en la mayoría de las ocasiones, el enfoque de estas propuestas políticas se centra eminentemente en la sostenibilidad ambiental del sector agrario. El problema, y es el principal mensaje que hemos trasladado, es que no se tiene en cuenta la igualmente necesaria sostenibilidad económica y social del sector, estableciendo objetivos inalcanzables o con un coste inasumible para las explotaciones agrarias y ganaderas de carácter profesional”, señala Luis Cortés, coordinador estatal de Unión de Uniones.
Así mismo, Unión de Uniones ha destacado en Bruselas que este escenario de aumentar la exigencia sobre cómo se producen los alimentos en la Unión Europea se produce mientras se siguen permitiendo que los productos importados entren en nuestro sistema alimentario sin cumplir las mismas exigencias, suponiendo una competencia desleal que pone en riesgo el mantenimiento de la producción en Europa y por tanto también alcanzar los objetivos establecidos para el sector. En este sentido, la organización ha demandado de las instituciones comunitarias un compromiso real para el incremento de las exigencias, y el establecimiento de verdaderas cláusulas espejo que eleven los estándares exigidos para los productos importados.
La organización ha aprovechado esta visita para trasladarles a los responsables de Parlamento como de la Comisión Europea estas y otras propuestas en relación con las iniciativas legislativas que en estos momentos se negocian a nivel comunitario, así como otros aspectos de relevancia para el sector agrario.
Con Ricard Ramón, de la DG Agri de la Comisión Europea, se ha analizado la aplicación de la PAC durante el periodo 2023-2027, principalmente de los resultados de aplicación en España de los ecoesquemas. Unión de Uniones ha incidido en que el PEPAC español no ha conseguido enfocar suficientes esfuerzos en el agricultor y ganadero profesional. También se debatieron las posibles tendencias futuras de la Política Agrícola Común para el futuro periodo post 2027. En el transcurso de la reunión se habló además del avance en mecanismos como el de las cláusulas espejo para garantizar las mismas condiciones de producción de los productos agroalimentarios importados que los europeos.
Posteriormente, se ha tenido una ronda de contactos con eurodiputados españoles del arco parlamentario europeo (Grupo Socialista, Grupo Popular, Grupo Verdes y no adscritos), centradas fundamentalmente en las iniciativas legislativas que el Parlamento lleva a cabo en estos momentos. Para Unión de Uniones es muy importante “lograr un Reglamento de uso sostenible de fitosanitarios que no socave la capacidad productiva europea, y especialmente mediterránea, con condiciones imposibles para producir en las zonas sensibles o la prohibición de materias activas sin disponer de alternativas para los cultivos viables”, tal y como ha reiterado en las reuniones. También se ha tratado la evolución de los trílogos de la Ley de Restauración de la Naturaleza, la situación de la ganadería en la Directiva de Emisiones Industriales, la propuesta de bienestar animal o las últimas iniciativas sobre la gestión del lobo a nivel comunitario.
Otro de los puntos en los encuentros ha sido la reclamación a los eurodiputados de una mayor exigencia en materia de acuerdos comerciales con terceros países. Para la organización, las iniciativas ambientales europeas van a tener un efecto incluso contradictorio si se siguen elevando las exigencias en la UE mientras se permite la importación de productos agrarios con unos requisitos de producción inmensamente laxos comparados con los europeos. “Por ello y para evitar la externalización de la producción agraria en la UE reclamamos de forma insistente la necesidad de aplicar ya las cláusulas espejo y otros mecanismos que eleven las exigencias a las importaciones de forma inmediata en los acuerdos de libre comercio”, indica Luis Cortés.