Tratamientos fitosanitarios con dron: menor deriva sedimentada y aérea

Menor deriva sedimentada y aérea, por lo tanto, menor contaminación ambiental; las zonas de seguridad pueden ser menores; se reduce el uso de fitosanitarios, mayor seguridad para las aplicaciones… estas son algunas de las ventajas de la aplicación de tratamientos fitosanitarios con dron en el que trabajo el Grupo Operativo Go PhytoDron

Por Marga López, periodista agroalimentaria

El pasado viernes 25 de noviembre, el Grupo Operativo GO PhytoDron organizó una jornada de campo con exhibición de vuelo de dron aplicador en mandarino. Un evento que congregó a más de un centenar de técnicos que pudieron comprobar la preparación de los equipos para la aplicación y su puesta en práctica en un campo de mandarinos, situado en Benacazón (Sevilla).

Esther García Montoro, de Corteva, entidad represente de GO PhytoDron nos explica el objetivo de este grupo operativo.

Esta jornada se enmarca en las acciones este Grupo Operativo cuyo objetivo es impulsar el uso de los drones como herramienta segura para realizar aplicaciones de productos fitosanitarios, buscando avanzar en su marco regulatorio y estableciendo escenarios de uso con los que promover su posible equiparación a las aplicaciones terrestres convencionales. En definitiva, GO PhytoDron busca demostrar la necesidad de adaptar un marco regulatorio, en el que el uso de drones debe dejar de ser considerado como una aplicación aérea para pasar a formar parte de las aplicaciones terrestres, lo que redundará en beneficio del sector productor, ya que de esta manera se facilitará la puesta en el mercado de una tecnología útil y segura que pueda ser utilizada en el ámbito agrícola y forestal.

Demostración de dron en mandarino

La jornada arrancó con una breve presentación del Grupo Operativo, así como del ensayo que más tarde veríamos en campo, donde se ha estudiado la calidad de la aplicación, la seguridad para el aplicador y para las personas que se encuentran próximas a la finca tratada, la deriva y posibles residuos y la eficacia de la aplicación.

Ya en campo, pudimos comprobar los pasos necesarios para poder llevar a cabo dicha aplicación, las necesidades técnicas del vuelo del dron, las limitaciones actuales como son el volumen de caldo permitido en los drones, así como las baterías actuales, que limitan el tiempo de vuelo.

Otro aspecto que pudimos comprobar son los diferentes tipos de drones que se pueden emplear, sus características e idoneidad para cada tipo de explotación.

Especial interés despertó entre los asistentes los requisitos actuales para los vuelos, autorizaciones y permites administrativos, que hoy en día siguen limitando este tipo de aplicaciones.

Pero sin lugar a duda, el freno en el desarrollo de estas aplicaciones es la actual legislación europea, que considera las aplicaciones con drones aplicaciones aéreas, y estás en el marco de la UE están prohibidas. De ahí que GO PhytoDron trabaja para ofrecer a la administración nacional y europea estudios y herramientas que permitan desarrollar una nueva legislación donde las aplicaciones con dron se consideren métodos de tratamientos fitosanitarios terrestres, y esto impulse el desarrollo de formulaciones específicas y tecnología adaptada para ello.

Mamen Márquez Madrid, de AEPLA, coordinadora de GO PhytoDron

Estudios en olivar de alta densidad

Una vez finalizada la demostración en campo, pudimos conocer un estudio desarrollado por la Universidad de Sevilla de tratamientos de fitosanitarios con dron en olivar en alta densidad.

Según los estudios realizados, con la aplicación con dron se han generado menos deriva sedimentaria y menor deriva aérea, aunque la deposición en cultivo ha sido menor que en tratamiento hidroneumático. “Por ello, necesitamos tener un marco legislativo que nos permita su uso para poder desarrollar los equipos y la tecnología específica”, apuntó Manuel Pérez, de la Universidad de Sevilla.

Como conclusión, los estudios realizados confirman que es una alternativa al uso terrestre, que, al tratarse de aplicaciones con menor deriva, las distancias de seguridad se pueden ver reducidas, que hay una reducción en el uso de fitosanitarios porque se pueden hacer tratamientos más focalizados; pero también es una realidad, que este tipo de aplicaciones es útil para determinadas plagas y enfermedades donde quizás no es necesario el contacto directo con la materia activa.

Las acciones de este Grupo Operativo finalizan el próximo mes de marzo, momento en el que se recogerán todos los resultados de los diversos estudios realizados, para que las administraciones tengan herramientas para poder establecer un marco regulatorio que permita las aplicaciones de fitosanitarios con drones.