Plan del Tajo, «preocupación extrema»
En una reunión de urgencia, la Comisión de Gobierno de Proexport analizó, el Plan Hidrológico del Tajo para el período 2022-2027 aprobado, el 29 de noviembre, por parte del Consejo Nacional del Agua, que sigue las líneas básicas del borrador hecho público en junio de 2021 y que supondrá el incremento de los caudales ecológicos y en consecuencia un drástico recorte en los volúmenes de agua trasvasada al Segura.
Para el presidente de Proexport, Mariano Zapata, “nadie duda ya de que se trata de una medida política e ideológica, ni técnica y mucho menos medioambiental, como se quiere hacer creer, pues de los 1.008 kilómetros por los que discurre el río Tajo, la subida de su caudal se propone única y exclusivamente en el único tramo que afecta al trasvase para Alicante, Murcia y Almería. No creemos en las casualidades”. Para Zapata “lo que está ocurriendo es muy triste, pues no es Marruecos, ni la UE, sino el Gobierno de tu propio país quien decide acabar sin causa justificada con el trasvase y empobrecer a esta Región. La ministra de Medio Ambiente debe hacer un replanteamiento urgente de esta medida, y escuchar por una vez al sector agrario, a miles de agricultores y familias que en él trabajan y a toda la sociedad murciana”.
Proexport, asociación integrada en FEPEX, recuerda que la catástrofe histórica que supondrá esta medida para la Región de Murcia y el resto de las zonas del Trasvase ya fue valorada por la propia Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), organismo dependiente del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITECO). Este organismo determinó, en su elaboración del Plan Hidrológico del Segura, que los nuevos caudales ecológicos que plantea el Plan de Cuenca del Tajo conllevarían el abandono de 12.228 hectáreas de regadío, se produciría una pérdida directa del valor de producción de 137 millones de euros anuales y de 232 millones de euros anuales con los efectos inducidos en otros sectores, además de afectar gravemente a las rentas en manos de las familias. La CHS estimó que el impacto social de esta medida obligará a enviar al paro a 8.060 trabajadores. El empobrecimiento que causará la reducción de recursos para riego se traducirá en la pérdida patrimonial en la demarcación hidrográfica del Segura de unos 485 millones de euros.
La asocaición murciana alerta de que el incremento de los caudales ecológicos del Tajo y el consiguiente recorte del trasvase al Segura, pondrá en peligro la competitividad del sector de frutas y hortalizas, pues los costes de producción serán inevitablemente más elevados, al obligarse a mezclar a gran escala aguas marinas desaladas, mucho más caras y con impactos ambientales, en un contexto internacional de costes de la energía crecientes. “Advertimos que es una política antisocial, porque las explotaciones más modestas y con agriculturas tradicionales y familiares, no podrán subsistir y en pocos años las veremos expulsadas del sistema agrícola productivo. Es un coste desproporcionado para esta demarcación hidrográfica, tanto desde el punto de vista económico, como social y ambiental”.
El mantenimiento del trasvase Tajo-Segura es imprescindible para el futuro del sector hortofrutícola, según FEPEX. La disponibilidad de agua con un volumen y precio asumible constituye una variable determinante del futuro de la producción y exportación de frutas y hortalizas en todas las zonas productoras y especialmente en Alicante, Murcia y Almería.