Las brásicas superan un verano estable y afrontan un invierno incierto por la sequía

Los expertos esperan que las 50.000 hectáreas de brócoli o las 15.000 de coliflor rindan y que la falta de lluvia no afecte a la producción de brásicas para consumo local y exportación. 

El cultivo de las plantas brásicas, como el brócoli, la coliflor o la col, afronta ahora un periodo del año incierto, el invierno, cuando la producción depende especialmente de las condiciones climatológicas de determinadas zonas productoras. El verano ha dejado una campaña “buena en líneas generales”, especialmente por las lluvias que se produjeron este año, entre la época de Semana Santa y el mes de junio, para las 50.000 hectáreas de brócoli, las 15.000 hectáreas de coliflor, otras 3.000 de coles y 600 de col rábano.

Los productores especializados en este tipo de cultivos afrontan ahora una temporada de invierno que, para los expertos, llega marcada por dos claves: la climatología que pueda desarrollarse en los meses de invierno y cómo va a afectar especialmente a Murcia, como principal productora de Brásicas, donde se concentra el 70 por ciento de la producción nacional.

Las básicas, cultivos “perfectos” para dar rotación a la lechuga, siguen estando en a lista de productos demandados por el mercado español, especialmente brócoli que, dentro de esta variedad de plantas, es el producto estrella en verano, ya que la coliflor no tiene tanta presencia en esta época del año.

El consumo de los hogares ha experimentado un aumento significativo en España. En este caso destaca la coliflor que, según datos de 2023 del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, su demanda representa un crecimiento de casi el 60 por ciento en los últimos cinco años, hasta dejar una media de 15.314 toneladas, aunque todavía muy lejos de las 31.317 toneladas de brócoli, el producto preferido por los consumidores.

Exportaciones

Las Brásicas también son productos que se exportan, fundamentalmente desde los cultivos de la Región de Murcia, que representa el 66 por ciento de las exportaciones de brócoli y coliflor del país, con 236.786 toneladas durante 2023, una cifra muy por encima de la segunda provincia que más vende en el exterior, Alicante, con 33.735 toneladas, según datos de Proexport.

En el caso del brócoli, tiene como destino más de una docena de países, entre los que destacan como consumidores Inglaterra y Alemania, pero también Países Bajos, Francia o Polonia, entre otros. Murcia es la principal comunidad autónoma exportadora, por valor de 436 millones de euros el pasado año, muy por delante de Valencia, en segundo lugar. En el conjunto del país se estima un valor de exportación que supera los 600 millones de euros.

En el caso de la coliflor, como segundo cultivo de Brásica más importante en España, Murcia igualmente es la principal productora y, por tanto, la principal exportadora también a los mismos destinos que en el caso del brócoli.

España, sin embargo, no tiene capacidad para poder penetrar en otros países demandantes de este tipo de cultivos, como son los mercados de Polonia, Hungría, Moldavia o Rumanía, que se abastecen principalmente de la producción que se genera en Egipto y Turquía. José Hernández Torres, experto en el cultivo de Brásicas en Rijk Zwaan, ha puesto el acento en el problema que existe también con otro tipo de producciones que se realizan fuera de la Unión Europea, donde las condiciones de trabajo o los estándares de calidad no están sujetos a la misma regulación o a las mismas exigencias normativas que en España.

El control de las condiciones de los trabajadores del campo en países del norte de África y Oriente Medio o la aplicación de normas en materia de calidad del producto y otros requisitos de carácter sanitario son todavía un “tema tabú” para Hernández a nivel de política comunitaria y aboga por que estos otros países exportadores asuman las normativas que sí tienen los estados europeos.

Pesimismo y precios

José Hernández Torres, especialista en cultivo de Brásicas en Rijk Zwaan Ibérica ha señalado que el invierno puede suponer una campaña de “bastante producción” en zonas como Navarra, Extremadura, Castilla-La Mancha o Andalucía debido a que ha sido un año de lluvias, que ha favorecido volver a la producción que se venía registrando hace dos o tres años atrás. Esta situación contrasta con la Región de Murcia que, tal y como ha explicado José Hernández, ha tenido un “pésimo año de precios”. “Se junta el pesimismo, el poco dinero ganado y unos problemas de sequía muy serios que pueden llevar a plantar menos”, ha afirmado el experto.

Como medida para paliar esa ausencia de lluvias, los sistemas de riego con agua salina que se aplican en algunos casos en los cultivos de Brásicas no suponen, a juicio de José Hernández, una solución, ya que se retrasa la producción y afecta a sus características. Por tanto, en el caso de que la climatología continuara castigando a Murcia con ausencia de lluvias, la “perspectiva es la de que va a faltar producto” en los mercados dado que esta comunidad autónoma es donde más producción se registra no sólo de brócoli, sino también del resto de Brásicas.

No obstante, para los expertos en el cultivo de Brásicas, teniendo en cuenta la demanda de productos por parte de determinados países del entorno de la Unión Europea y el ascenso registrado en el consumo local doméstico, tanto brócoli, como coliflor como las coles, entre otros cultivos menos representativos, constituyen una base importante en el mercado de hortalizas al aire libre, que hay que “cuidar y defender”.

Artículo publicado en la revista ECA Fruits ED. 24