La importancia de los microelementos en el viñedo
Agrométodos nos expone la importancia de los microelementos en el viñedo, por aportes esenciales para el desarrollo vegetativo de este cultivo.
El aporte de micronutrientes es fundamental para poder completar el ciclo vegetativo ya que su carencia impide el desarrollo completo y normal de la planta (criterios de esencialidad de Arnon y Stout, 1939) originando deficiencias que afectan muy negativamente a la producción de uvas y a la calidad de los vinos que estas dan. Generalmente, los niveles de aporte necesarios para cubrir dichas necesidades son bajos, aunque es importante que exista un equilibrio entre ellos.
Los principales micronutrientes para la vid son el hierro, zinc, manganeso y boro porque intervienen en procesos tan importantes como son la formación de clorofila y la fotosíntesis, la germinación del polen y el cuajado de la uva, etc.
El Hierro
El hierro (Fe) interviene en la síntesis de la clorofila y participa en otros procesos enzimáticos y metabólicos muy importantes en la planta.
La carencia de hierro o clorosis férrica es el déficit más frecuente en los viñedos españoles debido a que estos se cultivan principalmente en suelos calcáreos y alcalinos (Tagliavini y Rombolà, 2001; Gruber y Kosegarten, 2002). Existen además otros condicionantes como el bajo contenido de materia orgánica de los suelos, la compactación del terreno, el riego, la aplicación de dosis altas de macronutrientes como el nitrógeno y fósforo, etc., que favorecen la incidencia de dicha carencia.
La sintomatología principal de la clorosis férrica en vid, al igual que en otras especies, es el amarilleamiento internervial de las hojas más jóvenes. Este amarilleamiento se produce por la inhibición en la síntesis de clorofila, ya que el Fe es un elemento esencial en el proceso. En situaciones más avanzadas, evoluciona a una decoloración completa de la hoja, denominada “cottis” (Champagnol, 1984).
Los principales efectos de la clorosis férrica son:
- – Corrimiento de flor
- – Secado de raquis
- – Reducción de producción
- – Mostos con menor calidad organoléptica (más ácido, menos solidos solubles, etc.)
El Zinc
El zinc (Zn) tiene un papel importante en la estructura de muchas enzimas y en la regulación de la expresión génica. Muestra un efecto positivo en el cuajado, la maduración y el agostamiento.
En las plantas con carencias de zinc se produce una importante caída en la síntesis de proteínas y, en las hojas, se ve afectada la biosíntesis de carbohidratos (Marschner, 2012). Asimismo, la carencia de este microelemento produce corrimiento y racimos más pequeños de lo habitual, en la planta induce alargamiento de los entrenudos y conduce a la formación de cepas de menor tamaño. La deficiencia de zinc se agrava con la sequía.
Los síntomas externos más evidentes son una falta de crecimiento y la clorosis internervial en las hojas (parecida a la clorosis férrica).
El Manganeso
El manganeso (Mn) juega un papel importante en la activación de enzimas entre las que se encuentran algunas relacionadas con la escisión de las moléculas de agua durante la fotosíntesis. En ciertas regiones vitícolas, se asocia al bouquet del vino.
La carencia de manganeso en la viña produce deficiencia en el cuajado, disminuye el vigor de las cepas y la fertilidad de las yemas, además de mermar la calidad de la uva y su maduración.
Como síntomas externos de la carencia de este elemento se puede apreciar el amarilleo o enrojecimiento difuso de las hojas apareciendo necrosis periféricas, pero respetando los nervios de las hojas. Por otro lado, los sarmientos presentan un agostamiento incompleto.
El Boro
El boro (B) interviene en numerosas funciones en el cultivo de la vid, favoreciendo la fecundación y cuajado de los frutos e interviniendo en sistemas enzimáticos y en el transporte y metabolismos de azúcares.
La deficiencia de boro reduce el cuajado de frutos y genera racimos heterogéneos y de bayas pequeñas. En las hojas jóvenes se manifiesta una clorosis entre las nervaduras y cuando la deficiencia es severa, pueden ser deformes. Los entrenudos son cortos y los puntos de crecimiento acaban por morir.
Para evitar estas carencias en los viñedos, Agrométodos dispone del producto LANZADERA® GREEN que es un producto complejado con el exclusivo Sistema Lanzadera®. Esta tecnología envuelve a los cationes hierro, manganeso y zinc, protegiéndolos de reacciones indeseadas. Además, la estructura molecular del Sistema Lanzadera® es similar a la de las moléculas de la superficie de la planta, por lo que los tres cationes (Fe, Mn y Zn) estabilizados son atraídos hasta la cutícula vegetal y “lanzados” al interior de la planta.
El Sistema Lanzadera®, gracias a su menor tamaño de moléculas, nos asegura:
– mayor velocidad de absorción y penetración en la planta.
– una rápida asimilación y acumulación en las hojas y frutos.
LANZADERA® GREEN está especialmente recomendado para prevenir o corregir eficazmente los estados carenciales de estos tres microelementos.
La versatilidad de los productos de la gama Lanzadera® radica en su doble posibilidad de aplicación tanto vía foliar como vía riego donde, gracias a su tecnología, es igualmente eficiente y eficaz.