Interovic y Cruz Roja llevan cordero a los más necesitados
INTEROVIC, la Interprofesional de la Carne de Ovino y Caprino de España que tiene por objetivo fomentar el conocimiento y el consumo de la carne de lechal, cordero y cabrito de origen nacional, se ha unido a Cruz Roja para realizar una acción solidaria y llevar carne de cordero nacional a los más necesitados durante las fiestas navideñas.
Gracias a las donaciones que varias empresas colaboradoras con la iniciativa promovida por Interovic y Cruz Roja han podido aportar, tanto carne fresca de cordero nacional como cocinada siguiendo la tradicional receta de caldereta, albergues y centros de distintos puntos de nuestra geografía podrán disfrutar de este alimento cuyo consumo es tan señalado durante estas fechas.
En concreto han sido seis las empresas participantes en la acción quienes han donado 400kg de carne de lechal y cordero: Corderex/ EA Group, Grupo Amaro Corderos de Riaza S.L., Hermanos Masa S.L., Hernández Maguregui S.A., Moralejo Selección S.L. y Ovejas y Corderos. Dichas donaciones serán repartidas en distintos centros de Logroño, Burgos, Asturias, Zaragoza, Ávila, Córdoba y Málaga.
Por su parte, INTEROVIC también ha donado otros 300kg de carne de cordero a diferentes comedores sociales de Mensajeros de la Paz, dos ubicados en Madrid: El Pozo y Villaverde; y el de La Bañeza en León. Es el cuarto año consecutivo que se lleva a cabo esta colaboración y el objetivo de ambas iniciativas no es otro que combatir la desigualdad en las mesas y que todo el mundo pueda disfrutar de un plato tan típico como es la carne de lechal, cordero y cabrito en Navidad.
El origen, el factor más importante
La colaboración es parte del proyecto Más cerca es mejor, cuyo objetivo es fomentar el consumo de la carne de lechal, cordero y cabrito de origen nacional, especialmente estas navidades donde se estima la entrada a España de más de 800.000 corderos de importación.
“La carne de origen nacional se puede diferenciar mirando las etiquetas o preguntando al carnicero por su origen. Durante la campaña hemos repartido más de un millón de etiquetas y distintivos con origen nacional para que el consumidor garantice su procedencia. Además, es producto más fresco que el importado de otros países, tiene menos huella de carbono porque no ha viajado los miles de kilómetros que viaja cuando viene de otros países y está criado con nuestra alimentación y nuestras costumbres” explica Raúl Muñiz, presidente de INTEROVIC.
Son muchos los motivos que dan pie a esta iniciativa. Empezando por apoyar al sector primario y garantizar a los consumidores la frescura del producto nacional frente al de importación, este último causando además un importante impacto en la huella de carbono.
Continuando por necesidad de mantener un oficio que ha contribuido a conformar la identidad cultural de muchos territorios de España y que hoy día genera gran cantidad de empleo en la España Rural. La trashumancia, reconocida como Patrimonio Cultural Inmaterial es un legado muy valioso que ayuda a conservar nuestro entorno rural y, gracias al pastoreo, los rebaños previenen los incendios dejando el campo libre de matojos y matorrales.
Además, es importante consumir cordero de origen nacional por la seguridad de nuestros alimentos. Gracias a un método de producción y alimentación único en el mundo, en España se garantiza al consumidor la calidad y seguridad alimentaria del producto, del campo a la mesa.
Fijarse en el etiquetado es la mejor manera de asegurar la procedencia de nuestro cordero y es una tendencia al alza. Ocho de cada diez consumidores de carne manifiestan que el origen del cordero está presente en el etiquetado y la mayoría prefiere consumir carne de cordero y cabrito de origen nacional.
En definitiva, al consumir productos de origen nacional los consumidores están apostando por nuestros ganaderos, por nuestros pueblos, por nuestras razas autóctonas y por un producto mucho más fresco, además de garantizar el futuro de un sector que tan perjudicado se ha visto en los últimos tiempos.
La importancia del sector
Tras el Brexit, España ha pasado a liderar la producción europea de carne de ovino con el 18% del total de la producción.
El sector ovino ha sido uno de los primeros damnificados por la crisis y en los primeros meses registraron un descenso de las ventas cercano al 70% por el cierre de la hostelería. A pesar de temer por las cifras referentes a su consumo, se ha recuperado un poco al lograr incrementar el consumo en el hogar, reactivar las exportaciones y apostar por los nuevos canales de venta.