El súper se normaliza en julio tras 4 meses disparadas por el Covid
Las compras en el supermercado volvieron a la normalidad durante el mes de julio después de cuatro meses disparadas por la covid-19, según las cifras que maneja la consultora Nielsen, que ya avecina la entrada en una “nueva etapa” marcada por las dificultades económicas.
Esta subida contrasta con los repuntes vividos entre marzo y junio, con incrementos del gasto por semanas que oscilaron entre el 8 y el 72 %.
De acuerdo con la consultora, la covid-19 se puede dividir en tres etapas: la fase de acopio, en marzo, cuando el desembolso en el supermercado se disparó de media un 29 %; el confinamiento, con un aumento del 17 %; y la desescalada, que arrancó a finales de mayo con subidas del entorno del 8 %.
Sólo sigue disparado el gasto en fruta
La estabilidad que se ha observado en julio se debe a la moderación del gasto tanto en comida envasada como en frescos, sobre todo en la segunda quincena.
La única excepción ha sido la fruta, que creció un 16 % y se erigió en la única de las grandes categorías que se mantuvo en el doble dígito.
Los autores del informe han señalado que se vislumbra el inicio de una nueva fase en la que “se frena el efecto directo de la covid-19” y el principal factor a tener en cuenta serán “las condiciones económicas”, que han empeorado como consecuencia de la pandemia.
De hecho, ya anticipan un “reajuste múltiple en el comportamiento del consumidor” y distinguen entre dos grandes perfiles de clientes: los “ajustados”, afectados de alguna manera por la crisis, y los “acomodados”.
Dicotomía entre lo barato y lo “gourmet”
Según sus proyecciones, mientras que los primeros ya están modificando sus hábitos de compra por las “estrecheces económicas”, los segundos buscarán “darse lujos en casa al no poder dárselos fuera”, lo que genera “un caldo de cultivo propicio para el premium“.
En este sentido, han avanzado que también habrá un mayor esfuerzo por parte de las cadenas de supermercados en ofrecer “promociones y descuentos”, después de que en algunos momentos del confinamiento se alcanzaran cotas históricamente bajas.
Desde Nielsen han destacado la creciente importancia del área de parafarmacia para los supermercados, con las mascarillas como producto “estrella”, a lo que se suma la tendencia a reforzar las actividades en el hogar.
Como ejemplo, ha citado la sección de repostería (harinas, levaduras, etcétera), donde el gasto se ha duplicado en el “período covid” respecto al ejercicio anterior, así como los tintes para el pelo, que suben casi un 40 %.