Andalucía simplificas las ayudas de la PAC
La Junta de Andalucía simplifica las ayudas de la PAC creando unas bases reguladoras únicas para ganar celeridad
La consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Carmen Crespo, ha anunciado en el Parlamento de Andalucía que, antes de que finalice este año, se publicarán las bases reguladoras comunes por las que se regirán las ayudas del Plan Estratégico de la Política Agraria Común (Pepac) en Andalucía. “El objetivo es tener solo una base reguladora de todas las órdenes de la Junta y, de esta forma, dar celeridad y simplificar las ayudas que estamos dando a los agricultores y ganaderos de nuestra tierra”, ha subrayado.
Carmen Crespo ha recordado otras actuaciones impulsadas desde el Gobierno andaluz en beneficio de los productores del campo para, por ejemplo, adelantar el 25% de las ayudas para la incorporación de jóvenes a la actividad agraria; o para simplificar subvenciones. “Estamos haciendo que llegue liquidez a nuestros agricultores y ganaderos”, ha afirmado la consejera, concretando que entre 2014 y 2018 “sólo llegaron 488 millones de euros a los productores andaluces y con el Gobierno de Juanma Moreno ya van 1.472 millones de euros”. “El cambio está claro”, ha recalcado.
Entre otras líneas de ayuda, la consejera se ha referido a las subvenciones que impulsan el relevo generacional en el sector agrario, para las que se han movilizado cerca de 300 millones de euros; y ha señalado que se trata de una cantidad “claramente superior a lo que se destinaba anteriormente”. Crespo ha apuntado que “hasta el momento se han incorporado 4.000 jóvenes gracias a las políticas del nuevo Gobierno y en el próximo presupuesto se contemplan 120 millones de euros para incorporar a 1.800 más”. “Sin embargo, en los mismos años del marco anterior sólo se unían al sector 770 nuevos agricultores y ganaderos”, ha explicado.
La consejera ha resaltado que se han duplicado las ayudas para modernización de explotaciones agrarias hasta alcanzar los 166 millones de euros; que “el sector ganadero se ha incluido entre las cuestiones de primer orden” de la Junta y que las subvenciones para estos productores por la Covid-19, el impacto de la guerra de Ucrania y la sequía “se han pagado en tan solo tres meses”. Asimismo, ha subrayado que “en este momento están aprobados para la ganadería extensiva 70 millones de euros, algo que jamás había existido para nuestros ganaderos”.
En su intervención, Carmen Crespo ha hecho alusión también a las subvenciones que respaldan la mejora de caminos rurales de Andalucía afirmando que se ha producido “un cambio radical”. La responsable de Agricultura ha explicado que de los 290 caminos incluidos en el Plan Itínere, 211 están terminados o en ejecución; y ha lamentado que anteriormente 104 ayuntamientos, “de todos los colores políticos”, se vieran obligados a renuncia a estas ayudas por no poder hacer frente al reparto de los costes al 60%-40%. “Ahora la Junta se hacer cargo del 100% a través de las ayudas”, ha apuntado.
Por otro lado, Crespo ha puesto de relieve que las subvenciones que facilitan la contratación de seguros agrarios se han incrementado de 7,5 a 16,6 millones de euros y que la Junta pone ahora fin al “pago en diferido”. Además, la consejera ha recordado que el Gobierno andaluz ha aprobado tres Decretos de Sequía para luchar contra la complicada situación que afecta a la región y que, en el marco de estas normativas, se han pagado ya ayudas de mínimis a los ganaderos y se están ejecutando “obras hidráulicas que eran absolutamente necesarias”. En este ámbito, ha hecho hincapié en que, partiendo de cero, “ya tenemos encima de la mesa 70 hm³ de aguas regeneradas para nuestros agricultores; y el objetivo es conseguir 140 hm³ de estos recursos alternativos que se pueden aprovechar en el riego de los cultivos en períodos de escasez como el actual”.
La consejera ha señalado que el Ejecutivo regional está llevando a cabo “una política de auxilio caracterizada por estar junto a los agricultores y ganaderos en la búsqueda de soluciones para sus problemas y en su defensa ante el Ministerio o ante la Unión Europea hasta donde tenemos competencias, y a veces, incluso más allá”.
Fitosanitarios y cláusulas espejo
Durante su discurso, Carmen Crespo ha comentado también cuestiones de relevancia para el campo andaluz que se elevan al ámbito comunitario. En concreto, ha lamentado que “se está perdiendo un tiempo precioso” al no aprovechar la presidencia de la Comisión y el Consejo de la Unión Europea (UE) “para introducir en el orden del día de los ministros elementos de vital importancia como el reglamento de los fitosanitarios y la inclusión de cláusulas espejo en los acuerdos comerciales con terceros países”.
En cuanto al primer asunto, la consejera ha recordado que Andalucía se ha “opuesto firmemente al disparate de reducir los fitosanitarios al 50% sin materias alternativas al ser inasumible por parte de la agricultura y porque, entre otras consecuencias, esta medida pondría en riesgo la soberanía y suficiencia alimentaria de la Unión Europea”. Crespo ha recordado que, precisamente, ella misma estuvo defendiendo la renovación del uso del glifosato ante el departamento europeo de Agricultura; y ha reiterado que es necesario que la norma se adapte a la propuesta de la Comisión de Agricultura en lugar de recoger las particularidades presentadas por la Comisión de Medio Ambiente.
En el caso de las cláusulas espejo en acuerdo comerciales de la UE con terceros países, la consejera ha lamentado que el ministro de Agricultura “ha aprovechado poco este momento idóneo para introducir un tema del que están pendientes los agricultores desde hace años”. “España nos ha defraudado porque, siendo un país agrario, no ha introducido las cláusulas espejo como tema fundamental a tratar a pesar de que permitirían demandar que todos los productos que se consumen en Europa tengan las mismas exigencias laborales, medioambientales y sociales”, ha comentado.
Por otro lado, Carmen Crespo ha afirmado que la enmienda a la Ley de Protección de la Naturaleza presentada por el Partido Popular europeo es “de absoluta necesidad” para evitar que se reduzcan las tierras de cultivo; y ha apostado por que este cambio se contemple en el texto que se eleve a los trílogos.