Almería destruye productos hortofrutícolas por los bajos precios
La fuerte caída de la cotización de todos los productos hortofrutícolas ha activado todas las alarmas y el sector destruye producto. Ante esta situación sostenida de caída de precios, durante más de una semana, COEXPHAL-APROA ha reunido su Junta Directiva con urgencia para analizar esta grave situación que sufre el sector hortofrutícola almeriense un año más.
En dicha Junta, se ha informado de los volúmenes y precios actuales, con comparativas de otros años y otros orígenes. Algunos datos llamativos son que el pepino se cotizaba estos días a 0.16 € de media y el tomate liso a 0.14 €.
La situación, lejos de mejorar, se prevé que puede empeorar en los próximos días/semanas debido a varias circunstancias: condiciones meteorológicas muy favorables, presencia de producto holandés (se ha alargado su campaña), descontrol de entradas de productos de terceros países, etc.
Como consecuencia de todo ello, Se llevó a cabo una destrucción de producto, con la participación de varias empresas asociadas, en un acto ‘simbólico’ como punto de partida para emprender diferentes acciones, mientras se extienda la actual crisis de precios. De esta forma, se decidió lo siguiente:
- Reclamar a las administraciones competentes la protección de los productos hortofrutícolas europeos, frente a la entrada sin control del producto de terceros países en clara desventaja competitiva.
- Recomendar a todos sus asociados la retirada del 5-10 % de productos con calidad comercial, a fin de disminuir la oferta actual. Para ello, se ha solicitado a la administración puntos de retirada de producto para visualizar este acto.
- Seguir reclamando a las administraciones competentes la persecución de prácticas ilegales como el re-etiquetado fraudulento de productos provenientes de terceros países. Así mismo, reclamar los nombres de las empresas expedientadas por estas prácticas, al objeto de expulsarlas de la asociación.
Por otro lado, se ha verificado que la actual ley de la cadena, lejos de mejorar la situación, no responde en absoluto al objetivo primordial que debería tener, proteger al eslabón más débil de la cadena, el agricultor y su empresa productora-comercializadora.