ASAJA, COAG y UPA exigen “ayuda urgente” a la Comisión Europea
Las organizaciones agrarias representativas españolas exigen ir más allá de medidas administrativas y aplicar “verdaderas medidas de mercado”.
La Unión Europea puede y debe hacer mucho más para apoyar a uno de sus sectores más estratégicos y esenciales: los agricultores y ganaderos. Así lo han manifestado las organizaciones profesionales agrarias españolas representativas. ASAJA, COAG y UPA exigen a la Comisión Europea, encabezada por Ursula von der Leyen, que apoye de forma urgente a los productores de alimentos del continente.
UPA, COAG y ASAJA, que han mantenido una reunión telemática con el ministro de Agricultura, Luis Planas, coinciden en que “no hay excusas” para activar medidas de gestión de mercado que ayuden al sector en momentos de dificultad.
Por el momento, las medidas implantadas por el comisario de Agricultura, el polaco Janusz Wojciechowski, se han limitado a cuestiones administrativas, como la ampliación del plazo para la solicitud de ayudas de la PAC, algo “totalmente insuficiente”, a juicio de los agricultores y ganaderos españoles.
Una “tormenta perfecta” para el sector
La pandemia provocada por el coronavirus ha terminado de completar una tormenta perfecta para el sector agrario español. Tormenta que comenzó con el veto de Rusia a la importación de productos españoles, o el incremento de los aranceles por parte de Donald Trump en Estados Unidos.
“Tenemos motivos más que suficientes para activar esas medidas”, han señalado. Medidas que deberían consistir en planes de almacenamiento de leche, quesos y carne, ayudas al sector ovino y caprino y destilaciones de crisis.
Coincidencias ante Planas
En la videoconferencia con el ministro de Agricultura, Luis Planas, COAG, UPA y ASAJA han puesto en valor el trabajo que están desempeñando los agricultores y ganaderos en estos duros momentos de pandemia, asegurando un suministro estable de alimentos y aportando seguridad en tiempos de incertidumbre. Las OPAs han analizado cuestiones como el precio de los alimentos, la necesidad de mano de obra en el campo de cara a las campañas de verano, o la situación de la aplicación de la reforma de la Ley de la cadena alimentaria.