Antonio Vergel: «sin fitosanitarios, la producción agro-alimentaria se reduciría más de un 50%»
Por Milagros Jurado
Sin fitosanitarios la producción agro-alimentaria se vería reducida drásticamente hasta un 50%, y sería imposible asegurar las necesidades alimentarias de las poblaciones presentes y futuras, según ha advertido Antonio Vergel, presidente del Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Agrícolas (COITAND), en el transcurso de la jornada inagural del 14º Symposium de Sanidad Vegetal, que se celebra en Sevilla del 25 al 27 de enero. Vergel ha lamentado que un enfoque restrictivo en la normativa comunitaria esté dificultando el registro y uso de nuevos productos, pese a ser la sanidad vegetal pieza clave de la producción agrícola. Por su parte, la consejera de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Carmen Ortiz, ha asegurado que desde la Junta de Andalucía se trabaja por impulsar la sanidad vegetal a través de las ayudas a los Grupos Operativos de Innovación.
A través de los Grupos Operativos de Innovación se fomenta la colaboración público-privada en materia de sanidad vfegetal, poniendo en contacto a agricultores, ganaderos o industrias que tengan un problema concreto con investigadores y empresas que puedan aportar soluciones. En ese sentido, la consejera andaluza ha insistido en la necesidad de «seguir investigando, desarrollando nuevas técnicas y, sobre todo, hacer que las soluciones estén disponibles para los agricultores», recalcando la importancia de que desde el sector se hagan propuestas de proyectos que impulsen la cooperación en esta área.
Para Ortiz, la sanidad vegetal constituye una herramienta fundamental para afrontar los nuevos retos de la agricultura actual, para lo cual es imprescindible poder contar con los medios técnicos y legales necesarios para garantizar la seguridad de los consumidores y la confianza de unos mercados cada vez más exigentes. En esa línea, el presidente del COITAND, organizador del evento, ha llamado la atención sobre el hecho de que cada vez son menos las herramientas fitosanitarias de las que puede disponer el agricultor para controlar las malas hierbas, plagas y enfermedades.
Asimismo, Vergel se ha referido al lema del 14º Symposium: “Hacia el cambio”, resaltando la importancia de adaptarse a aspectos como el cambio climático, la seguridad alimentaria, la gestión del medio ambiente, los nuevos modelos demandados por el mercado, etc., para afrontar el futuro con eficacia y eficiencia. Punto en el que coincide la representante del Gobierno andaluz, quien ha subrayado que la Consejería de Agricultura “tiene el firme objetivo de garantizar la sanidad vegetal de nuestras producciones y la seguridad alimentaria de nuestros productos, así como proteger nuestros mercados, actuando siempre de manera anticipada”.
Ortiz ha recordado que antes de la aplicación de la Directiva de Uso Sostenible de Fitosanitarios (Real Decreto de 2012), Andalucía ya había recorrido un importante camino en cuanto a la lucha contra plagas y enfermedades de manera sostenible y segura. Como ejemplo, ha expuesto que, desde hace más de una década, es obligatorio contar con un carné de aplicador de fitosanitarios y desde hace casi 20 años «venimos impulsando las producciones sostenibles».
En Andalucía operan más de 240.000 aplicadores de fitosanitarios acreditados y casi 5.000 profesionales prestan asesoramiento en esta materia
Asimismo, Carmen Ortiz ha reconocido el trabajo y esfuerzo del sector por llevar a cabo métodos sostenibles de producción, que ha hecho posible que Andalucía sea en la actualidad la primera comunidad autónoma española en este campo (producción ecológica, producción integrada y lucha biológica contra plagas en cultivos extensivos como los hortofrutícolas almerienses).
La consejera ha enumerado además otras actuaciones puestas en marcha por la Consejería en el ámbito de la sanidad vegetal, como los cursos formativos que se han llevado a cabo a través del Ifapa, el apoyo que se ofrece a las Agrupaciones de Productores para la Producción Integrada y el Tratamiento Integrado de Plagas, así como el asesoramiento que presta la Consejería a través de la Red de Alerta e Información Fitosanitaria (RAIF). Igualmente, ha hecho hincapié en la apuesta del Gobierno andaluz por nuevas áreas de actuación «donde somos referentes, como es el caso del Big Data o la Bioeconomía».
Por último, Carmen Ortiz ha resaltado la «necesidad de combatir las plagas entre todos». Es fundamental, ha añadido, «que los productores se organicen y se coordinen para poder controlar de forma eficaz enfermedades de los cultivos». Entre las amenazas de este tipo que más preocupan actualmente ha señalado la Xylella Fastidiosa y la mancha negra de los cítricos. Para prevenir, controlar y erradicar estas enfermedades en Andalucía, la Consejería puso en marcha la Estrategia Andaluza contra la Xylella y el Plan Andaluz de Vigilancia Fitosanitaria de los cítricos, respectivamente.
Otro de los participantes en el acto inaugural del Symposium, Valentín Almansa, Director General de Sanidad de la Producción Agraria del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA), ha definido este evento como un referente a nivel nacional y una cita ineludible para los profesionales de la sanidad vegetal, que cuenta con el apoyo del Ministerio.
Por su parte, Mari Cruz Ledro, presidenta del Symposium Nacional de Sanidad Vegetal, ha manifestado que «los retos como la protección de la naturaleza y la salud humana son un desafío al que un mundo globalizado tiene que responder con enfoques y estrategias comunes, inversiones acertadas y metodologías innovadoras”.
Frente a esta responsabilidad común, la formación y experiencia del colectivo de técnicos agrícolas supone un valioso capital para la implementación de soluciones correctoras, transformando las debilidades en fortalezas como garante del mejor equilibrio posible.
Mari Cruz Ledro: «la protección de la salud humana y del medio ambiente en los tratamientos fitosanitarios, siempre está presente en los verdaderos profesionales»
La presidenta del Symposium ha valorado la figura del técnico agrícola como “imprescindible en un sector que exige una gran preparación y que se rige cada vez más por criterios empresariales de calidad integral. La profesionalidad de la actividad agraria obliga a buscar asesoramiento”.
Carlos León, coordinador del Symposium, ha puesto de manifiesto la labor integradora del Symposium como principal foro a nivel nacional en materia de sanidad vegetal.
Ponencias
En su ponencia «Visión Global del futuro de la Sanidad Vegetal», Valentín Almansa, Director General de Sanidad de la Producción Agraria del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA), ha señalado que la sanidad vegetal es cosa de todos. “Cuando hablamos de sanidad, hablamos de rentabilidad y por tanto, de mercado” y ha destacado el papel de la Administración como garante de la seguridad en los cultivos, al mismo tiempo que ha apelado a la responsabilidad del productor en el control y comunicación de los posibles problemas que pueda haber en los cultivos, siendo el principal actor en el control de las plagas.
También ha hablado de los retos y las oportunidades de la globalización, entre ellos y especialmente, el control de las fronteras. Asimismo, ha destacado algunas líneas de trabajo prioritarias que pasan por reforzar la vigilancia externa e interna para favorecer la sanidad vegetal.
El MAPAMA apuesta de manera decidida por desarrollar en España la estrategia de uso sostenible de los productos fitosanitarios, tal y como establece la normativa comunitaria
César González de Miguel, asesor de política fitosanitaria del COPA-COGECA, ha destacado en la conferencia “Visión de Agricultores Europeos sobre la sanidad vegetal” que el COPA-COGECA ha acogido de forma favorable el paquete de propuestas legislativas relativas a “una normativa más inteligente para unos alimentos sanos” con el fin de modernizar y simplificar la reglamentación existente. El principal logro que prevé alcanzar es un sistema eficaz y eficiente que permita un mejor control de las importaciones, sin obstaculizar el comercio internacional. Ha destacado el compromiso de los agricultores y cooperativas agrarias de la UE en proporcionar a los ciudadanos y a los consumidores unos alimentos sanos y seguros. Pero al mismo tiempo abogan por incrementar la disponibilidad de herramientas para el agricultor a la vista de las limitaciones en cuanto a alternativas viables para el manejo de plagas y enfermedades.
César González: «el uso o no de una sustancia activa debe ser una decisión técnica y no tiene que estar dictado por la Opinión Pública»
En su opinión, «si contamos con menos herramientas para el control de plagas y enfermedades, dejaremos de ser competitivos ante terceros países que pueden usar la gran mayoría de las sustancias activas».
Por otro lado, Carlos Palomar, Director General de AEPLA, ha explicado en “Visión a nivel europea de la industria fitosanitaria” que “la industria fitosanitaria, tanto europea como española es un sector comprometido, altamente regulado cuya base es la innovación. Sin innovación es imposible enfrentarse a las plagas, enfermedades y malas hierbas, algo especialmente significativo para la agricultura española, líder en exportación de frutas y hortalizas”. Asimismo, ha remarcado que «la sanidad vegetal no es un capricho sino algo tan esencial como la sanidad humana».
Para ello, a su juicio, se precisa un sistema regulatorio que fomente la innovación y no se base, exclusivamente, en el principio de precaución. También que dote de recursos a los encargados de autorizar productos porque el sistema actual, el Reglamento 1107 va camino del colapso.
Palomar: «crear un agencia autónoma para el registro de nuevas sustancias es fundamental para afrontar el futuro»
En la jornada de la tarde, Bibiana Rodríguez, Subdirectora General Adjunta del MAPAMA, ha abordado la situación normativa nacional y comunitaria de los bioestimulantes.
Emilio Rodríguez, Jefe Adjunto de la Unidad de Economía Agraria de la Comisión Europea, ha explicado “el análisis de impacto económico de las políticas comunitarias de cambio climático y sanidad vegetal”. Ha presentado las herramientas y aplicaciones usados en la unidad Economía y Agricultura del JRC (JointResearch Centre), situada en Sevilla. Se ha discutido el posible papel de los modelos económicos en la elaboración de listas prioritarias de plagas para la UE basadas en su impacto socio-económico.
Como cierre a la jornada, Judit Anda, consejera técnica de Viceconsejería de Agricultura, ha hablado de la bioeconomía y sanidad vegetal. Estados como España han desarrollado Estrategias Nacionales de Bioeconomía, y comunidades autónomas como Andalucía ha decidido desarrollar una Estrategia de Bioeconomía teniendo en cuenta las oportunidades de la región sobre todo por su potencial en biomasa. La nueva programación de los fondos europeos en Andalucía tiene en cuenta la bioeconomía en el desarrollo de las políticas de desarrollo rural.
Los sistemas productivos ligados a la bioeconomía están siendo impulsados por la Comisión Europea como un nuevo modelo de negocio que permite dar respuesta a los retos sociales y económicos de la sociedad actual
Pero, ¿qué hay detrás del término “bioeconomía”? Para la UE significa una economía que utiliza los recursos biológicos de la tierra, el mar, los residuos, como insumos para la producción de alimentos, piensos, para la producción industrial y energética.
En la UE la bioeconomía ya tiene un volumen de negocios de cerca de 2 billones de euros y da empleo a más de 22 millones de personas, el 9% del empleo total de la UE