El Gobierno aprueba rebajas fiscales en el IRPF de 2024 para 800.000 agricultores y ganaderos
El Gobierno ha aprobado una rebaja del IRPF 2024 para agricultores y ganaderos acogidos al sistema de módulos, según recoge el Boletín Oficial del Estado (BOE).
La medida, promovida por el Ministerio de Hacienda a propuesta del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) beneficiará a más de 800.000 profesionales del sector en toda España.
Con las nuevas modificaciones del Gobierno IRPF 2024, busca apoyar a los sectores más afectados por las condiciones climáticas extremas, como la sequía persistente y el impacto de la DANA registrada entre el 28 de octubre y el 4 de noviembre. Las circunstancias adversas han afectado severamente a la rentabilidad de numerosas explotaciones, sobre todo en el sur y este peninsular.
La orden contempla una rebaja general del 5 % en el rendimiento neto para todos los agricultores y ganaderos acogidos al sistema de módulos. Además, se establecen reducciones específicas del 30 % para sectores como el ovino y caprino de leche y carne, especialmente golpeados por la sequía y enfermedades como la lengua azul.
A nivel territorial, la norma introduce más de 10.800 reducciones específicas en distintas comunidades autónomas, provincias y municipios. Las producciones de cereales y frutales no cítricos se encuentran entre las más beneficiadas por estas medidas.
Entre otras medidas destacadas, la orden mantiene las reducciones del 35 % por adquisición de gasóleo agrícola y del 15 % por compra de fertilizantes, aplicadas ya en los últimos años. También se extiende el coeficiente corrector del 25 % por uso de electricidad en regadíos, y se mantiene la exención del IRPF para los pagos recibidos por ecorregímenes de la PAC.
Desde el Ejecutivo se estima que el conjunto de estas rebajas supondrá una reducción de la base imponible cercana a los 1.025 millones de euros, aliviando la presión fiscal sobre el campo en un momento especialmente delicado.
Con estas medidas, el Gobierno busca ofrecer un respaldo fiscal directo y adaptado a las dificultades reales del sector primario, fortaleciendo así su viabilidad económica en un contexto de creciente incertidumbre climática y de mercado.