FECOAM propone un plan de arranque voluntario para el sector del limón
Más de 12.000 has y una producción que ronda las 1.600.000 Tn hacen necesario tomar medidas urgentes para salvar el sector del limón
La Federación de Cooperativas Agrarias de Murcia (Fecoam) afirma que la situación actual del sector del limón hace que las diferentes propuestas que son necesarias poner encima de la mesa “deban de ir encaminadas hacia una mayor organización de la producción para ser más competitivos, regularizar la superficie, mejorar la profesionalización del sector y llegar a mejores calidades de producto».
Desde Fecoam se apunta a la llegada de inversores ajenos a la actividad agrícola que, atraídos por rentabilidades pasadas, ha provocado que en ocho años se duplique el número de limoneros plantados, alcanzando cifras superiores más de 1.600.000 toneladas.
Tal y como explica Joaquín Rubio, representante sectorial de la federación, «este año puede considerarse como el peor para el sector del limón en su historia, con 400.000 toneladas no recolectadas, a las que hay que sumar que lo comercializado ha sido a precios muy bajos».
Sobreproducción y caída de precios
Para Rubio, «es difícil plantear una solución para la superficie propasada, que se encuentra en torno a 12.000 hectáreas», pero sí es necesario «implementar un plan de arranque voluntario para reequilibrar la producción de cítricos a la demanda del mercado».
Además, “solicitamos el apoyo de la Administración para el fomento de la concentración de la oferta mediante acuerdos entre cooperativas para la comercialización conjunta de frutas y hortalizas”.
Respecto a la retirada de fruta no comercial, “uno de los grandes retos del sector es alcanzar un acuerdo entre producción, comercialización e industria, para que el precio que se percibe por la fruta destinada a industria cubra, como mínimo, los costes de retirada”, afirman desde las cooperativas agrarias.
Como explican desde Fecoam, en años con sobreproducción como esta campaña, a los precios bajos o la no comercialización hay que sumarle el coste de retirada de la cosecha, “que es la puntilla para nuestros agricultores”. “Es necesario un ejercicio de responsabilidad por parte de todas las partes del sector para evitar la no rentabilidad para el productor, que es la base que sustenta toda la cadena”, remarca Joaquín Rubio.
Medidas fiscales
Por otro lado, con una campaña «muy mala» tras los daños por las inclemencias meteorológicas, la caída en el consumo y pérdida de poder adquisitivo de los consumidores por la alta inflación, así como el descenso en las exportaciones y la situación actual, «son necesarias medidas fiscales ajustadas a la realidad de la campaña 2023».
Estas pasarían por “una reducción de módulos adicional para el sector el limón”. Ante la negativa por parte del Ministerio de Agricultura de aceptar una reducción del índice para 2023, debido a que la situación de mercado no puede ser motivo de reducción, Fecoam propone que este Ministerio “amplíe las circunstancias que motivan la reducción, siendo la coyuntura de mercado una de ellas, evitando posibles problemas para los próximos años”.
También se solicita un mayor apoyo económico destinado al aumento de la subvención autonómica para el seguro agrario, con una mejora en las coberturas y condiciones de aseguramiento del seguro agrario de cítricos.
Sanidad vegetal en el sector del limón
Uno de los factores que más incide en la calidad del producto son los daños causados por las plagas, que se trasladan en pérdidas económicas. En este sentido, “debe ser prioritario potenciar las herramientas con las que se cuenta en materia de sanidad vegetal”, remarca Rubio. Una buena forma sería recuperar la figura de las agrupaciones de tratamientos integrados en agricultura (ATRIAS). Antes del 2015, estas figuras se encargaban del control y seguimiento de plagas. “A día de hoy, no disponemos de ellas y debemos de ver la forma de retomarlas”, destacan desde Fecoam.
Trazabilidad y cláusulas espejo en el sector del limón
Desde Fecoam también se reclama el desarrollo de un registro nacional de transacciones para el control de operaciones intracomunitarias de limón bio, “de forma que se garantice su trazabilidad”. “La necesidad del registro es clave”, destaca Joaquín Rubio, “por lo que solicitamos que desde la Consejería se traslade la necesidad al Ministerio de Agricultura”, buscando los apoyos de Andalucía y Comunidad Valenciana.
Por último, “también es necesario y urgente que la Unión Europea establezca unas reglas del juego estándar para toda la fruta que se consume en todo el territorio comunitario”. Por ello, “exigimos que los cítricos que tengan que entrar, cumplan con las mismas exigencias sociales, medioambientales y sanitarias”, a través de cláusulas espejo.