“Esta campaña volvemos a los volúmenes habituales, alrededor de 145.000 Tn de fruta comercial”
Con la campaña en marcha desde mediados de abril en el caso de la sandía, y finales de ese mismo mes en melón, recorremos junto a Anecoop cada una de sus zonas de producción, para analizar previsiones de volumen y superficie de cultivo.
Entrevista a Carlos Nemesio Tordera, subdirector comercial de Anecoop y coordinador del programa comercial de sandía.
Anecoop es una de las grandes entidades en producción de sandía. ¿Qué superficie aglutina tanto de melón como de sandía y que potencial productivo manejan?
Nuestra capacidad productiva en estos momentos es de unas 165.000 toneladas de sandía, y de aproximadamente 25.000 Tn. de melón. Si la campaña se desarrolla con normalidad, deberíamos ser capaces de poner en el mercado en torno a 145.000 toneladas de sandía y 20.000 Tn de melón.
De cara a esta nueva campaña, ¿hay cambios en la superficie de melón/sandía cultivada?
En términos globales, este año quizá estemos igual o un poco por debajo del pasado en cuanto a superficie de sandía. Las distintas zonas de producción que componen nuestro calendario se han visto afectadas de manera diferente por los factores externos que influyen en este cultivo.
En Almería, por ejemplo, estamos ante cifras ligeramente inferiores, condicionadas principalmente por una disminución de superficie allí por la persistencia del virus que afecta a las cucurbitáceas. La zona extratemprana de Berja mantiene los niveles, incluso un poco por encima, en el poniente tal vez un poco por debajo y en la zona de Níjar crece la superficie.
En las primeras zonas de aire libre y de cultivo bajo malla del norte de la provincia de Almería, la superficie ha disminuido debido a las restricciones de agua para el conjunto de los productores.
Por su parte, en Andalucía occidental, la falta de agua se ha visto aplacada en el caso de los productores de sandía por el uso de agua de sus pozos, por lo que la superficie de cultivo se mantiene. En esta zona, sin embargo, lo que ha condicionado el cultivo ha sido el retraso de plantación debido a las lluvias del mes de marzo.
A pesar de ello, en Anecoop pusimos en marcha el año pasado un programa de prueba comercial que funcionó muy bien, lo que nos ha llevado a aumentar la superficie. En esta campaña esperamos alcanzar entre 3.000 y 4.000 toneladas de sandía de la zona.
En Murcia, mantenemos los niveles de años anteriores y, si la climatología lo permite, tendremos una campaña normal.
En Valencia aumentamos en torno al 25% en superficie, gracias al efecto llamada de los buenos resultados del año pasado. La puesta en marcha en 2023 de un proyecto de recuperación del cultivo nos llevará a situarnos en los 20.000 Tn de kilos de sandía de la zona esta campaña.
Por último, en Castilla La Mancha, donde nuestra producción se concentra en la provincia de Ciudad Real, nos moveremos en unos volúmenes conservadores que se mantienen con respecto al año pasado.
Desde el punto de vista de las tipologías, ¿cuáles son las apuestas de Anecoop?
En melón tenemos en el surtido los cuatro tipos que más demanda la distribución europea, Galia, Amarillo, Cantaloup y Piel de Sapo, aunque estamos centrados sobre todo en las variedades de esta última tipología.
Nuestra familia de sandías se compone principalmente de variedades sin semillas de sandía roja de corteza rayada y negra, amarilla, mini y rayada y negra con microsemillas.
La rentabilidad de estos productos ha sido muy cambiante en las últimas campañas, ¿qué previsiones manejan para este nuevo ejercicio?
Llevamos tres campañas seguidas de contrastes. En 2021, tuvimos unas ventas récord en sandía, en una campaña con más producción, pero con una menor demanda debido a un verano con temperaturas muy por debajo de la media en casi toda Europa y precios, en consecuencia, mediocres.
En 2022 sucedió justo lo contrario. El periodo continuado de lluvia y calima del mes de marzo afectó a las plantaciones, provocando una merma muy acusada de oferta. Esta falta de producto, unida a la buena demanda de un verano caluroso, dio lugar a precios altos para el poco producto disponible, pero provocó importantes desajustes en la planificación comercial con los clientes.
La temporada pasada, la campaña de sandía y melón también se caracterizó por la falta de producto, sobre todo en la parte central del verano que es el periodo de mayores ventas, donde prácticamente tuvimos que racionar la fruta.
Esta situación repercutió en una mejora de los precios en momentos de la campaña que sin embargo no llegaron a compensar la falta de volumen, salvándose solo algunas zonas.
Según nuestra planificación, esta campaña volvemos a los volúmenes habituales, alrededor de 145.000 Tn de fruta comercial. Si la climatología acompaña tanto desde el punto de vista productivo como del consumo, esto debería verse reflejado en los resultados.
Entrevista publicada en la revista ECA Fruits Ed. 23