Urge crear el mapa genético del chile americano
Aunque Bolivia, y México comparten el centro de origen del chile y existen dieciséis especies endémicas en Sudamérica, los países asiáticos representan más del 60% de la producción mundial.
Desde hace veinte años, países como China, India, Corea, Indonesia, Turkia y Nigeria participan activamente en la producción y el comercio de las más de 45 especies de chiles que se encuentran en los mercados mundiales.
Aunque los genetistas reconocen que el centro de origen de la especie Capsicum annum se encuentra en Bolivia, la existencia de variedades silvestres y la domesticación del cultivo se asocia a México, particularmente a las cuevas de Coxcatlán en el valle de Tehuacan, entre los estados de Puebla y Oaxaca, donde se han encontrado semillas de chiles silvestres con una antigüedad de más de ocho mil años. Para mayores detalles sobre la domesticación del chile, existen datos arqueológicos en los asentamientos zapotecos de Mitla y Monte Albán que datan de seis mil años.
Sin embargo, la duda sobre la domesticación y el desarrollo de este cultivo americano, se basa en la existencia de variedades que se distribuyen en seis grupos principales como son C. Annum, C.Chinense, C. frutescens, C. pubescens, C.pendulium y C. mínimum con más de 50 variedades entre las que destacan el Aji amarillo, Mirasol, Pimiento, Cherry, Santaka, Bell, Paprika, Cayenne, Pasilla, Habanero, Jalapeño, Serrano, Tabasco y Ancho.
Grupos geográficos del continente americano
Para darnos una idea de la diversidad genética asociada al continente americano, podemos mencionar la existencia de cuatro grupos geográficos de esta solanácea, que abarcan desde el sureste de los Estados Unidos hasta la parte occidental de Sudamérica con doce subespecies; el segundo grupo con una subespecie va del sureste de Brasil a las costas de Venezuela; el tercero se ubica en la costa este de Brasil y cuenta con un inventario de diez subespecies; finalmente el cuarto grupo corresponde a Bolivia desde donde corre hacia Perú, Paraguay y norte de Argentina con ocho subespecies.
Cabe mencionar que dieciséis especies se consideran endémicas de América del Sur y estas representan la mayor cantidad de especies del género Capsicum restringidas a una sola área. Igualmente existe en Arizona, Estados Unidos, un área restringida y protegida del chiltepín.
Respecto a los bancos genéticos del chile, los de mayor importancia se encuentran en Estados Unidos ( U.S National Plant Germoplasm System) ubicado en Griffin, Georgia cuenta con una colección de 3,000 accesorios de variedades de chile provenientes de todo el mundo. Otras colecciones activas e importantes, se encuentran en Taiwan (Asian Vegetable Research and Development Centre), Costa Rica (Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza), Holanda (Center for Genetics Resources) y Alemania (Central Institute for Genetics and Germoplasm).
Sin embargo, México, Guatemala, Bolivia y Perú, que cuentan con una rica historia genética y culinaria sobre el chile, adolecen de un centro genético donde se puedan realizar las investigaciones para determinar la importancia de las especies silvestres, que curiosamente se encuentran asociadas a la polinización de pájaros. En estos países y particularmente en México, donde la producción de chiles alcanza más de 2.2 millones de toneladas anuales y exportaciones por 560 millones de dólares. Resulta más que necesario iniciar las acciones para recopilar las variedades silvestres e integrar un banco genético con las especies de mayor importancia económica, incluso aquellas que se utilizan en China, para producir más de 15 millones de toneladas anuales.