Una campaña citrícola llena de desafíos
Cristóbal Aguado Laza, presidente de AVA-ASAJA nos trae este artículo de opinión en exclusiva para la revista ECA FRUITS donde se analiza la situación citrícola en España.
No hay dos campañas iguales y esta, sin duda, nos ha dejado un desafiante e irregular escenario caracterizado por la escasez de la oferta, los disparados costes de producción, la buena evolución de los precios -insuficiente, eso sí, para muchos agricultores- y los robos.
Según el aforo del Ministerio de Agricultura, tendremos la segunda cosecha más corta de la década a causa de la sequía que ha castigado con virulencia a todo el territorio nacional, especialmente al sur peninsular. El panorama no resulta mucho mejor en la Comunidad Valenciana, donde el fuerte viento de poniente en noviembre se sumó a anteriores adversidades climáticas como las altas temperaturas durante la floración, el inusual frío en mayo, las lluvias torrenciales y los temporales de pedrisco, las cuales fueron contribuyendo a mermar la producción. Así, el aforo citrícola en la Comunidad Valenciana preveía 2,79 millones de toneladas, un 3,8% menor a la campaña anterior que ya fue muy corta, pero creemos que la cosecha final aún será inferior por las últimas inclemencias meteorológicas.
Los elevados costes de los fertilizantes ponen en jaque la rentabilidad de las explotaciones.
Además de los desafíos climáticos, los citricultores han afrontado otros de naturaleza económica. Los elevados costes de los fertilizantes ponen en jaque la rentabilidad de las explotaciones, obligando muchas veces a reducir el abono. La proliferación de plagas y enfermedades eleva el número de tratamientos fitosanitarios. También la necesidad de riego constante, al no llover durante meses, incrementa los costes energéticos.
Las cotizaciones mundiales de la industria del zumo empujan al alza los precios del mercado en fresco pero, a la vez, alientan los robos para llevar las naranjas a las ‘peladoras’, donde el control de trazabilidad es mínimo. Además de vigilancia, que implica no pocos recursos, hace falta digitalizar la entrada de producto en estos centros de recepción para frenar la lacra de los robos.
Y, mientras tanto, las importaciones de países terceros disparan el riesgo fitosanitario. Sudáfrica ha batido su récord anual de detecciones de mancha negra y sigue sin cumplir la normativa europea del tratamiento en frío. Egipto ha dado una primera interceptación de mancha negra en sus cítricos. En el puerto de Almería se interceptó una partida de granadas marroquís con falsa polilla, lo que enciende las alarmas a todo el sector hortofrutícola. Además, el temor a la llegada del HLB crece a la velocidad que lo hacen los vectores en Portugal y Chipre.
Las importaciones de países terceros disparan el riesgo fitosanitario en el sector citrícola
Egipto se erige como una amenaza cada vez más fuerte para nuestra citricultura, pues coincide su producción con la de España. Aunque, según informaciones que recibimos del comercio, la calidad de la naranja egipcia no es comparable con la española.
Además, estamos trabajando en la interprofesional Intercitrus para alcanzar un acuerdo global que incluya un contrato homologado, una planificación inteligente de la temporada, una campaña de promoción y una rigurosa vigilancia para evitar la introducción de nuevas plagas y enfermedades.
Desde AVA-ASAJA recomendamos a los productores que vendan sin prisas, hagan números de lo que les cuesta producir un kilo de fruta y defiendan un precio digno que permita compensar la extraordinaria subida de los costes de producción y la escasa cosecha prevista.
Artículo publicado en la revista ECA Fruits Ed. 22
