Sector del olivar español: «El liderazgo no se proclama, se ejerce»
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación destaca la importancia de este I Congreso Mundial de Olivicultura y Elaiotecnia, porque permite compartir prácticas reales innovadoras para que España continúe como un referente internacional en calidad en el sector del olivar
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha señalado que uno de los desafíos del sector oleícola es combinar cultura e innovación para afianzar su liderazgo en los mercados. El olivar es un cultivo de gran relevancia socioeconómico, ambiental y gastronómico para España, la primera productora mundial de aceite de oliva, que debe mostrar y demostrar que cuenta con un sector puntero, referente internacional. “El liderazgo no se proclama, se ejerce”, ha remarcado.
Luis Planas ha clausurado el I Congreso Mundial de Olivicultura y Elaiotecnia, Mundolivar. En su intervención, ha puesto en valor que encuentros como este son un importante estímulo para emprender, apostar por mejoras tecnológicas e impulsar la competitividad de un sector clave de la agricultura española. Mundolivar han congregado a 40 ponentes, ha celebrado 8 mesas redondas y ha sumado más de 1.000 asistentes.
Planas ha defendido que es necesario apostar de forma simultánea por el desarrollo tecnológico y la identificación del olivar tradicional, uno de los cultivos más importantes para la conservación de la biodiversidad, con gran arraigo en el territorio y que genera riqueza en el medio rural. Así, entre las estrategias a seguir ha señalado la puesta en valor de variedades antiguas minoritarias, de olivares de montaña, de olivares de secano o iniciativas como “Olivares vivos”, proyecto para incrementar la rentabilidad a partir de la recuperación de la biodiversidad.
También ha mencionado la importancia de la aplicación de la tecnología y de la innovación y ha citado como ejemplo la apuesta por procesos más eficientes desde el punto de vista del consumo de recursos hídricos y energéticos, con total automatización y trazabilidad, -la denominada Almazara 5.0-.
El ministro ha mostrado su satisfacción con la elección, ayer, de Jaime Lillo como nuevo director ejecutivo del Consejo Oleícola Internacional (COI)). Lillo ocupaba hasta ahora el cargo de director adjunto en asuntos técnicos y cooperación en esta organización que tiene su sede en Madrid y se convierte en el primer español en asumir este puesto. El COI es el organismo internacional más importante del sector oleícola.
ESPAÑA, LÍDER MUNDIAL EN PRODUCCIÓN Y EXPORTACIÓN
España es líder mundial en producción de aceite de oliva, con una media de 1,45 millones de toneladas anuales, el 45 % de la producción mundial. También en esta campaña 2022-2023, ha precisado Planas, España “ha mantenido la primera posición”, a pesar de la sequía, que ha situado la cosecha en apenas 663.000 toneladas, un 56 % menos que la anterior. Ha avanzado que la próxima será superior, aunque aún es pronto para hacer previsiones.
El sector del olivar constituye la principal actividad económica y es fuente de empleo en numerosos municipios. España lidera también la exportación de aceite de oliva en el mundo, con una media que ronda el millón de toneladas anuales, comercializadas en más de 150 países, y el pasado año generó un valor de casi 4.000 millones de euros.
La calidad conseguida gracias a la innovación del sector es la mejor garantía para fidelizar a los consumidores y mantener el nivel de demanda alcanzado, para lo que también es importante mantener unos precios estables, ha afirmado el ministro.
Luis Planas ha puesto en valor la “Hoja de ruta para el olivar”, que el ministerio puso en marcha en 2020, con medidas encaminadas a equilibrar la oferta y la demanda, lograr un mayor apoyo económico, aumentar la calidad de los aceites de oliva españoles y mejorar su percepción en los mercados.
En esa línea, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación aprobó en 2021 la norma de calidad para los aceites de oliva y de orujo de oliva para mejorar la trazabilidad de este alimento, en especial el aceite de oliva virgen extra (AOVE). El objetivo es contribuir a diferenciar este aceite, de máxima calidad, ante el consumidor, que se ha acompañado de un plan específico de control oficial que ya aplican, en esta campaña 2022-2023, las comunidades autónomas, con el apoyo del Gobierno.
LA NUEVA PAC Y EL PACTO VERDE EUROPEO
La nueva Política Agraria Común (PAC), que entró en vigor el 1 de enero, cuenta con una línea que apoya al sector, especialmente a las pequeñas y medianas explotaciones, que son las mayoritarias en el olivar. En concreto, dentro de los ecorregímenes, se contempla la implantación de estrategias para mejorar la captación de carbono del suelo, una medida en la que el olivar es uno de los cultivos con mayor experiencia. “Esta PAC que cuenta con unos fondos mejor distribuidos y que dispone de una ayuda asociada vinculada al olivar tradicional”, ha señalado.
Por otra parte, ha señalado que el Pacto Verde Europeo, “que si no existiera, sería necesario”, supone una oportunidad para visibilizar la importancia del cultivo del olivar ante la sociedad por su función como “barrera en el proceso de desertificación”.