España: El cultivo del caqui al detalle
Bayer ha reunido a más de 300 técnicos, investigadores, productores y agricultores para analizar el futuro del cultivo del caqui en España, un país que casi triplicará su producción de caqui en cinco años hasta alcanzar los 650.000 toneladas. El 90% del caqui español se cultiva en la Comunidad Valenciana.
El caqui se ha convertido en uno de los cultivos que mayor crecimiento ha experimentado en los últimos años en España. En la actualidad hay más de 6.000 agricultores productores de esta fruta. Según datos de la Denominació d’Origen Protegida Kaki Ribera del Xúquer, en 2010 se producían 12 millones de kilos de caqui en España, en 2015 la cosecha superó las 240.000 toneladas y la mayor parte de esta producción se exporta. En total, el año pasado la exportación superó las 160.000 toneladas estando presentes en 48 mercados. Una de sus principales ventajas es el elevado precio que alcanza este producto en destino, sobre todo en los mercados exteriores.
El cultivo del caqui en España ocupa una superficie cercana a las 17.000 hectáreas, de las que casi el 90% están en la Comunidad Valenciana, región promotora de este cultivo.
Para debatir el futuro de este producto, la división CropScience de Bayer ha celebrado el I Foro del Caqui en el que han participado cerca de 300 productores, investigadores y técnicos de toda España. Este encuentro busca potenciar la transferencia tecnológica entre la sociedad científica y los agricultores.
El foro ha estado dividido en seis bloques temáticos alrededor de este fruto: Entomología, Patología, Maquinaria, Mercados-Exportación, Variedades y Soluciones Bayer.
Alberto Urbaneja, Coordinador del Centro de Protección Vegetal y Biotecnología del Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA) ha abierto el bloque dedicado a la entomología hablando sobre la “Puesta a punto de un programa de gestión integrada de plagas en caqui”. En el transcurso de su charla ha explicado los últimos avances en el programa de gestión integrada en este producto en el que está trabajando actualmente el IVIA.
Urbaneja ha aprovechado este foro para lanzar el portal www.gipcaqui.ivia.es, un portal desarrollado en colaboración con la Cátedra Bayer y que recogerá todas las novedades en el desarrollo de este programa.
Francisco Beitia, Investigador científico del IVIA ha hablado de las “Especies de cotonets presentes en caqui e importancia de su correcta identificación”, ha señalado que el fuerte incremento en la producción de caqui en los últimos años ha venido, desgraciadamente, acompañado del aumento en las plagas que le afectan. En este sentido, ha afirmado que es importante identificar las especies concretas de plagas para un tratamiento más eficaz. Asimismo, ha señalado que dentro de sus investigaciones, recientemente han detectado una nueva plaga Delotococcus Aberiae, que puede incluso crear problemas a los exportadores.
Por su parte, Ferrán García, Catedrático de la Universitat Politècnica de València (UPV) ha explicado la “Red de Monitoreo On Line (UPV-BCS) de plagas y enemigos naturales en caqui: resultados 2015”. Una red que está a disposición de los agricultores a través de la web Bayer Agro Servicios.
Vicente Dalmau, jefe del Servicio de Sanidad Vegetal de la Generalitat Valenciana, ha hablado de las Nuevas plagas en el cultivo del caqui, como la mosca blanca, y las alternativas a su control. Ha afirmado que esta plaga, que chupa la savia y debilita el árbol a la vez que genera negrilla y por lo tanto rebaja la calidad comercial del fruto, empezó a ser un problema en 2015.
En su charla Dalmau ha dado recomendaciones en el control de esta plaga y ha asegurado que durante 2016 se seguirán haciendo prospecciones para asegurar que no hay nuevas zonas afectadas y testando la eficacia de diferentes productos en su tratamiento.
En el bloque destinado a patología, Antonio Vicent, investigador del IVIA ha hablado de las principales enfermedades fúngicas del caqui y ha apuntado algunas estrategias de control de las mismas. Como conclusión, ha señalado que aunque la situación fitosanitaria del caqui en España es óptima comparada con la de otros países, su expansión incrementa el riesgo de introducción de nuevas enfermedades. Por ello, ha asegurado que la responsabilidad es la mejor aliada en este caso.
Por lo que respecta al bloque de maquinaria, Patricia Chueca, investigadora del Centro de Agroingeniería del IVIA, ha departido sobre “la Mejora de la eficiencia de los tratamientos fitosanitarios en el caqui”. En este contexto, ha destacado que esta eficacia dependerá en gran medida de las condiciones meteorológicas, del estado evolutivo de la plaga y de los equipos de aplicación.
Centrándose en los equipos de aplicación, ha resaltado la importancia de la calibración del equipo (velocidad de avance, presión adecuada, número y orientación de las boquillas o selección del caudal del aire). También ha hablado de soluciones como los sistemas de precisión de detección de árboles o de la importancia de ajustar el volumen de aplicación en función de la vegetación, la plaga o el producto utilizado.
Una producción de 650.000 toneladas en 2020
En España se produjeron en 2015 cerca de 240.000 toneladas de caqui. Para 2020 se espera que esa cifra suba a las 650.000 toneladas. El principal reto que se presenta, según Rafael Perucho, gerente de la Denominació d’Origen Protegida Kaki Ribera del Xúquer, es hacer que la comercialización crezca al mismo ritmo que la producción.
Lo que está claro a día de hoy, es que para la gran mayoría de los consumidores que lo conocen, el caqui es un producto bueno o muy bueno. Casi el 80% lo compra por el sabor y casi el 90% está dispuesto a repetir la compra. El mayor problema es el desconocimiento de esta fruta. Así por ejemplo, en Alemania, el principal mercado exterior, solo el 30% de los consumidores lo conocen y de este porcentaje, el 50% lo compran. En España el conocimiento llega al 60%.
Francisco Borrás, subdirector general de Anecoop, ha señalado que el caqui es un producto que, en general, a nivel internacional, se exporta poco. España es la excepción ya que el 70% de la producción se vende fuera, gracias a Persimon. Una marca propia de la D.O. protegida Kaki Ribera del Xúquer que ha llevado al caqui a convertirse en la fruta del otoño. Asimismo, ha señalado que con mucha frecuencia, cuando esta fruta entra en el hogar, es para quedarse.
Ante la avalancha de producción que se espera en cinco años, Borrás ha identificado una serie de medidas que permitan gestionarla con eficacia: segmentar las calidades, diversificar las presentaciones, consolidar una campaña de cinco meses y abrir nuevos mercados.
Desarrollar nuevas variedades
Las doctoras Marisa Badenes y Mar Naval han centrado su exposición sobre las variedades del caqui. La dra. Badenes ha señalado que en la actualidad el IVIA está trabajando en dos estrategias para incrementar el número de variedades para limitar la dependencia actual de una sola variedad, la Rojo Brillante. Por un lado, lograrlas a través de fruta no astringente que conviva con la variedad Rojo Brillante y por otra mejorar genéticamente esta variedad para lograr otras que sean más tardías o más tempranas.
La dra. Naval ha departido sobre alguno de los problemas actuales de este cultivo como la salinización del suelo o la polinización cruzada que puede producir semillas en el fruto y por lo tanto disminuir su valor comercial.
Por último, Santiago Cerdá, jefe de Cultivo de Frutales de la división agrícola de Bayer, ha hablado de las nuevas soluciones en las que la compañía está innovando para dar respuesta a las necesidades de estos productores como el insecticida Movento®, el fungicida Flint® o el fitoregulador Fruitel®.
Fuente: Bayer