¿Cómo se implican los ganaderos jóvenes de una cooperativa en proyectos del medio rural?
Por César Marcos Cabañas, Periodista agroalimentario
Las Entidades Asociativas Prioritarias (EAP) son cooperativas que trabajan a diario para crear, mantener y mejorar una estructura profesional al servicio de un sector que abarque toda la cadena de valor agroalimentaria, pero también motivan para que sus socios más jóvenes participen activamente en sus cooperativas, modernicen su actividad y puedan crear empleo. Estos roles se han analizado por mujeres y hombres jóvenes de EA GROUP en varias jornadas celebradas recientemente. La conclusión principal es que reclaman ser interlocutores fiables de los territorios rurales en los que viven para la sociedad.
El mundo rural se encuentra ante un gran dilema: o modernizarse o correr el riesgo de que desaparezca el modelo social y productivo que lo ha mantenido a lo largo de los tiempos. El 13% del territorio rural en España acusa graves problemas de despoblamiento, según la Red Rural Nacional del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Ganaderos jóvenes, mujeres y hombres, socios cooperativistas de la Entidad Asociativa Prioritaria EA GROUP, han subrayado en varias jornadas la necesidad de implicarse más en proyectos ligados al territorio rural, mejorando sus habilidades de comunicación y de social media, aumentando su capacidad de influencia en la toma de decisiones de la EAP y en el diseño del modelo cooperativo futuro.
“Es muy importante contar la celebración de este tipo de jornadas de debate para que los más jóvenes sean conscientes de que hay que divulgar y promover el modelo cooperativo como fórmula de vertebración, en especial de la figura de una EAP”, ha declarado Juan Carlos Pozo Crespo, director general de EA GROUP.
En las jornadas se han expuesto casos reales. Ahí se trabaja en la implicación de los socios de cooperativas para crear, mantener y mejorar una estructura profesional al servicio de un sector desde la producción hasta la comercialización final del producto. Ponentes y expertos han puesto ejemplos de cómo se realizan inversiones para incorporar valor añadido a los productos que se comercializan, abrir nuevos mercados, establecer acuerdos para dar estabilidad a medio y largo plazo a los socios en comercialización de sus producciones, generar conocimiento a través de proyectos de I+D+i, transferir tecnología a los productores, hacer relevante el papel de las mujeres cooperativistas y su empoderamiento en los consejos rectores de las cooperativas, crear empleo directos y mejorar la comunicación de cara a la sociedad.
“Hay que trabajar el orgullo de ser ganadero, de contribuir a que sus pueblos no se abandonen, de mantener el medio ambiente y de ser embajadores del medio rural ante los medios y la sociedad civil”, ha indicado Beatriz Agudo, directora de I+D+i de EA GROUP.
Los jóvenes cooperativistas han recalcado que es la hora de que se impliquen y propongan cambios adaptados a sus necesidades del modelo cooperativo diseñado por sus padres y abuelos. Además, hay que integrar a los ganaderos, en este caso, en proyectos sociales como solución al problema del relevo generacional y el despoblamiento rural. La formación empresarial es un factor muy demandado por ellos.
Otras de las peticiones es la incorporación de nuevas tecnologías que faciliten y hagan más eficiente las horas de trabajo invertidas por los productores y transmitir información de nuevos mercados a los que se puede llegar y la manera en la que la EAP abre oportunidades para los ganaderos en ecológico.
En definitiva, se trata que mujeres y hombres cooperativistas se conviertan en unos interlocutores fiables de los territorios rurales con las personas que hoy son generadores de opinión a nivel nacional. Así las EAP podrán trasladar una realidad del campo que hoy no se entiende si no es a partir de proyectos comerciales en grupo y de mayor alcance que lo meramente artesanal y local.