El cuarto sector industrial español se reúne en MEAT ATTRACTION 2018
La industria cárnica es el cuarto sector industrial de nuestro país, sólo por detrás de la industria automovilística, la industria del petróleo y combustibles y la producción y distribución de energía eléctrica. El sector, formado por mataderos, salas de despiece e industrias de elaborados, tiene un tejido industrial constituido por cerca de 3.000 empresas, distribuidas por toda la geografía española, especialmente en zonas rurales. Aunque una parte significativa del sector son pequeñas y medianas empresas, esto no ha impedido el paulatino desarrollo y consolidación de grandes grupos empresariales, algunos de ellos líderes a escala europea.
La producción conjunta de todas estas empresas hace que la industria cárnica ocupe con diferencia el primer lugar de toda la industria española de alimentos y bebidas, representando una cifra de negocio de 24.000 millones de euros, el 22,3% de todo el sector alimentario español, en 2017, según datos de la Asociación Nacional de Industrias de la Carne de España, ANICE. Este potente sector estará representado en la única Feria de la Península Ibérica dedicada de forma monográfica a esta industria: la Feria del Sector Cárnico, MEAT ATTRACTION. El Salón, co organizado por IFEMA y ANICE, celebrará su segunda edición, del 18 al 20 de septiembre próximos, en la Feria de Madrid.
Unas cifra de negocio que suponen aproximadamente el 2,2% del PIB total español (a precios de mercado), el 13,6% del PIB de la rama industrial y el 4,1% de la facturación total de toda la industria española. El empleo sectorial directo de nuestras empresas, 85.706 trabajadores, representa el 24,3% de la ocupación total de la industria alimentaria española.
Un dato muy relevante es que la industria cárnica exportó el pasado año más de 2,3 millones de toneladas de carnes, despojos y productos elaborados de todo tipo, superando por primera vez los 6.000 millones de euros vendidos en mercados de todo el mundo, con una balanza comercial muy positiva del 477%, un dato que muy pocos sectores económicos relevantes pueden presentar, y que contribuye a paliar el tradicional déficit comercial de nuestro país.
La producción cárnica española
En 2017, y con un crecimiento más ralentizado del 1,6% respecto a 2016, la carne de porcino española ha registrado un nuevo hito de producción, al alcanzar los 4,25 millones de toneladas, lo que marca un año más un nivel histórico nunca alcanzado.
Por su parte, el sector de vacuno asentó la tendencia de recuperación iniciada a partir de 2014 y su producción de carne llegó a las 641.003 toneladas (un 0,6% más que al año anterior), y el ovino/caprino cayó un 1% respecto al volumen de 2016, alcanzando 125.487 toneladas.
Datos de consumo de carnes y derivados
En el año 2017, el consumo en el hogar de carnes y elaborados cayó un 1,4% en volumen, pero habría subido un 1,1% en valor, volviendo a la recuperación en algunos precios que había apuntado el año 2015.
Estos datos se recogen en el último panel de consumo del Ministerio de Agricultura (TAM diciembre 2017), que presenta un comportamiento en la categoría de carnes más acusado que la cesta global de alimentos y bebidas de los hogares, que cae solo un -0,7% en volumen pero mantiene un +0,6% en valor.
Según estos datos del Ministerio, todas las carnes frescas cayeron en volumen (-2,2%) mientras que en valor subieron cerdo (+2,5%), pollo (+0,8%) y conejo (2,2%), y volvieron a caer la carne de vacuno (-1,6%) y la de ovino/caprino (-2,2%). Por su parte, las carnes congeladas crecieron un 1,3% en volumen y un 2,7% en valor.
El comportamiento más positivo fue para las carnes transformadas, que en ese periodo progresaron tanto en volumen (1,0%) como en valor (+1,9%). Estos datos hay que ponerlos al lado de la información publicada por Nielsen, que refleja que los productos cárnicos crecieron un 4% en valor en 2017, hasta los 14.000 millones de euros.
Según la consultora, este crecimiento es debido a que el sector ha sabido satisfacer los valores que el consumidor demanda: salud, sostenibilidad, innovación, calidad y experiencia de compra. Los dos primeros la salud y sostenibilidad son los drivers fundamentales de crecimiento en la cesta de la compra de los consumidores. Para Nielsen, un 60% de los consumidores afirma esforzarse por realizar compras diarias saludables y un 46% intenta comprar productos respetuosos con el medio ambiente. Además, un 57% de los consumidores dice que está dispuesto a pagar más por productos de mayor calidad.